Ayudas por 750.000 millones en Alemania

«Lo que estamos haciendo es lo adecuado ante la enormidad del reto», dijo el vicecanciller federal y ministro de Finanzas, Olaf Scholz, al presentar el programa, que conlleva un presupuesto suplementario de 156.000 millones de euros y el fin de la política que impedía un nuevo endeudamiento por parte del Estado desde 2011. «No se trata solo de proteger las vidas y la salud de nuestros ciudadanos, sino también de los puestos de trabajo en nuestro país», afirmó Scholz, quien explicó que una parte de esos fondos irá destinada al sistema sanitario, pero también a compensar la falta de ingresos de los pequeños empresarios y comerciantes con el fin de que «nadie se quede sin aliento».

Se trata de «ayudar con rapidez», declaró el titular de Economía, Peter Altmaier, para el que es fundamental «conservar las pequeñas empresas aunque sus ingresos desaparezcan» repentinamente por las restricciones dictadas para frenar la expansión del Covid. En cuarentena domiciliaria voluntaria desde el domingo ante la posibilidad de un posible contagio, Merkel participó en la reunión del gabinete por videoconferencia.

El programa de múltiples paraguas contempla que pequeñas empresas y comercios, pero también trabajadores autónomos, reciban durante tres meses ayudas de hasta 15.000 euros. Un paquete para el que se han presupuestado 50.000 millones de euros. A través de un fondo de estabilización se garantizará la liquidez de las grandes empresas, en las que de ser necesario el Estado asumirá una parte de su capital.

Para este paraguas habrá disponibles 400.000 millones de euros en garantías crediticias para las firmas, mientras otros 100.000 millones serán destinados a participar en su capital si esa medida se hace indispensable para garantizar su supervivencia. Simultáneamente el público Instituto Crediticio para la Reconstrucción (KfW) inició ayer un programa de créditos extraordinarios para garantizar la liquidez de las empresas por un monto inicial de 100.000 millones de euros.

El Gobierno alemán aprobó también un proyecto de ley que impedirá a los caseros expulsar a sus inquilinos si estos son incapaces de pagar su alquiler por la falta de ingresos debido a la crisis por la pandemia y suspender por un periodo de seis meses la verificación de ayudas a la vivienda de quienes perciben subsidios sociales. Las familias con pérdidas de ingresos por la epidemia recibirán también ayudas suplementarias por hijos.

Igualmente el gabinete de Merkel amplía la normativa para la concesión de ayudas para el recorte de la semana laboral en las empresas con el objetivo de que estas puedan conservar sus empleados y no se vean obligadas a enviarlos al paro. Un paquete de 3.000 millones para los hospitales evitará también que estos tengan problemas financieros.

El Instituto Robert Koch de virología, responsable de coordinar la lucha en Alemania, informó de que la expansión en este país parece remitir. Su presidente, Lothar Wieler, destacó que la edad media de los infectados es de 45 años y de los fallecidos de 82. El 57% de los enfermos son hombres.