Italia tiembla por la escisión en el Movimiento 5 Estrellas

Al ser preguntado por si estaba preocupado por la escisión, Draghi respondió primero: «Veremos, veremos». Al final de la sesión parlamentaria en la que se aprobó mantener el apoyo armamentístico a Ucrania, los periodistas volvieron a plantearle la misma pregunta y respondió con un lacónico «no». En su comparecencia en el Senado, destacó en cualquier caso que «en estos momentos, cuando el país está implicado en una guerra», resulta «esencial» que se mantenga «la unidad» en Italia.

Di Maio se enzarzó en una pelea con el actual presidente del M5E, el exprimer ministro Giuseppe Conte, a cuentas del envío de armas a Ucrania y debido a los intentos por cambiar la norma interna que prohíbe a los miembros de esta fuerza política ocupar un cargo público durante más de dos legislaturas. Se espera que unos cincuenta diputados y senadores sigan a Di Maio en la escisión, que dará vida a un nuevo grupo parlamentario que podría llamarse 'Juntos por el futuro'. Muy crítico con Conte por los últimos batacazos electorales y por pretender poner fin al apoyo a Kiev, Di Maio y su nuevo grupo mantendrán a buen seguro el sostén al Gabinete de Draghi.

Resulta en cambio una incógnita cómo reaccionará a esta fractura el líder del M5E, pues lleva semanas mostrando su incomodidad con las posiciones del Ejecutivo. «Muchos ciudadanos me han pedido que salgamos del Gobierno. Nuestro electorado está sufriendo y no podemos darle la espalda. Que ninguno nos diga que estemos callados», advertía Conte hace unos días tras la debacle en las elecciones municipales, que han confirmado la casi desaparición del partido en algunas de las principales ciudades. El exprimer ministro garantizó entonces que el M5E sería «responsable», por lo que seguiría apoyando al Ejecutivo. Este martes mantuvo la posición al sostener a Draghi en su comparecencia en el Senado sobre el envío de armamento a Ucrania.

Formar parte de las tres coaliciones que se han sucedido en esta legislatura -las dos primeras lideradas por Conte y la actual por Draghi- le han pasado factura a esta fuerza política entre sus votantes, a los que sedujo inicialmente con un discurso 'anticasta' y populista, pero que la han abandonado en masa debido a las profundas contradicciones mostradas durante el ejercicio del poder. Basta pensar que aunque el fundador del M5E, el cómico Beppe Grillo, rechazaba en sus inicios llegar a alianzas con otros partidos, porque formaban parte «del sistema» y constituían «un problema cultural», durante esta legislatura el movimiento ha acabado formando coaliciones con casi todas las siglas políticas, desde la izquierda radical hasta la extrema derecha.