El Gobierno de Scholz considera «injerencia política» la petición de Elon Musk del voto para la ultraderecha en Alemania

El Gobierno germano que preside el canciller federal, Olaf Scholz, ha calificado este lunes de «injerencia política» la recomendación de votar en los próximos comicios generales adelantados por la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) por parte del multimillonario Elon Musk, asesor personal del electo presidente Donal Trump, según anunció una portavoz oficial del ejecutivo en Berlín.

«Lo cierto es que Elon Musk ha tratado con sus declaraciones de influir en las elecciones al Bundestag», dijo Christiane Hoffmann, viceportavoz del gobierno germano, quien reconoció que Musk es muy libre de expresar su opinión y señaló que el ejecutivo germano no tiene intención de condenarla, pero recordó que las elecciones las deciden los votantes en los comicios y son un asunto interno alemán.

El propietario de la automotriz Tesla, la firma aeroespacial Space X y la red social X publicó un artículo en el dominical Welt am Sonntag en el que hacía propaganda descarada a favor de AfD y afirmaba que la formación xenófoba y antieuropea «es el último rayo de esperanza para Alemania, que se encuentra «al borde del colapso económico y cultural», y en el que arremetía contra la inmigración, la economía regulada y las energías renovables, entre otras cosas.

Hoffmann subrayó que la libertad de expresión es un bien preciado y que no hay que compartir las opiniones de Musk, pero destacó que el potentado estadounidense aconseja votar a un partido que es considerado ultraderechista por los servicios de inteligencia interiores de Alemania, que lo tienen en permanente observación. AfD defiende la salida del país de la Unión Europea, la OTAN y el euro, el acercamiento a Rusia y la expulsión de refugiados y migrantes.

En cuanto a una reacción del propio Scholz a lo que ha provocado un aluvión de críticas entre los políticos de este país, también por la decisión del grupo editorial Springer y su rotativo conservador 'Die Welt' de permitir a Musk hacer propaganda para un partido que es marginado y condenado por las demás formaciones, Hoffmann fue tajante. «El canciller federal no comentará ahora decisiones editoriales. De ninguna manera», señaló la portavoz gubernamental.

A la pregunta de si el Gobierno federal seguirá haciendo uso de su cuenta en la red social X, Christiane Hoffmann comentó que «observamos naturalmente con gran preocupación lo que sucede en X», pero dijo que es importante valorar lo que puede suceder si se abandona ese canal y con ello se deja de alcanzar a sus usuarios. «En esa valoración opinamos actualmente que es correcto seguir ahí», señaló la portavoz.

Lars Klingbeil, presidente del gubernamental Partido Socialdemócrata Alemán (SPD), tuvo menos reparos a la hora de dar su opinión y comparó abiertamente a Musk con el presidente ruso, Vladimir Putin. «Ambos quieren influir en nuestras elecciones y apoyan específicamente a los enemigos de la democracia de AfD. Quieren que Alemania se debilite y se sumerja en el caos», declaró Klingbeil a los diario del Grupo Funke.

Anteriormente Friedrich Merz, presidente de la opositora Unión Cristianodemócrata (CDU) y candidato conservador a la jefatura del Gobierno germano, había calificado de «prepotentes y presuntuosas» las palabras de Musk. «No recuerdo un caso comparable de injerencia en la campaña electoral de un país amigo en la historia de las democracias occidentales», dijo indignado el líder de la oposición parlamentaria.

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