Cadena perpetua por complicidad para la viuda de un famoso violador y asesino en serie francés

«Confirmo lo que he dicho (en las tres semanas que ha durado el juicio) y lamento todo lo que hecho. Pido perdón a las víctimas, a sus familias a sabiendas de que es imperdonable todo lo que he dicho», dijo Monique Olivier horas antes de conocer la sentencia.

Esta antigua enfermera ha sido condenada por complicidad en el secuestro y asesinato de Marie-Angèle Domece (19 años), Joanna Parrish (20) y Estelle Mouzin (9).

Los cuerpos de Marie-Angèle y de Estelle, desaparecidas en 1988 y 2003 respectivamente, nunca fueron encontrados. En cambio, la Policía sí localizó el cadáver de Joanna, una joven inglesa asesinada, violada y maltratada por Fourniret en 1990.

La Fiscalía había solicitado cadena perpetua con un período de seguridad de 22 años sin reducción de pena «teniendo en cuenta la gravedad excepcional de los hechos cometidos y de la necesaria protección de la sociedad».

Olivier, de 75 años, tuvo un papel activo en los crímenes de su exmarido. Según los investigadores, fue su cómplice. Ella seleccionaba y atraía a las víctimas. Al ser mujer, no sospechaban de ella y, por ejemplo, se subían en su coche sin temor a que pudiera ocurrirles algo. Luego, Fourniret las violaba y las asesinaba.

Esta «pareja diabólica», como les llama la prensa francesa, se conoció gracias a un intercambio epistolar en 1987 cuando Fourniret estaba todavía en prisión, cumpliendo pena por la violación de una niña.

«Prisionero deseará mantener correspondencia con personas de cualquier edad para olvidar la soledad», decía el anuncio que puso Fourniret en un semanario cristiano y al que respondió Monique Olivier. A su salida de la cárcel en octubre de 1987, Olivier y Fourniet se casaron y tuvieron un hijo juntos, Selim.

Fourniret fue detenido y encarcelado de nuevo en Bélgica en junio 2003 tras un intento de secuestro de una adolescente de 13 años. En junio de 2004, confesó haber cometido seis asesinatos. Poco después, su mujer le atribuyó nueve crímenes.

El 'ogro de las Ardenas' fue condenado en 2008 y 2018 a dos cadenas perpetuas por el asesinato de ochos mujeres y adolescentes entre 1987 y 2002 en Francia y Bélgica.

La pareja se divorció en 2010 por mutuo acuerdo cuando ambos estaban en prisión y después de que la mujer denunciara los crímenes de su marido. Fourniret falleció en prisión en 2021, por eso Olivier ha sido la única juzgada ahora por estos tres crímenes que estaban hasta ahora sin resolver.

La viuda ya había sido condenada en 2008 a cadena perpetua por complicidad en 2008 por varios de estos crímenes cometidos por su marido y en 2018 a 20 años de prisión por complicidad en otro asesinato a manos de Fourniret. Según los cálculos de la Fiscalía, Monique Olivier podrá salir de prisión en 2035. Tendrá entonces 87 años.