La UE ofrecerá 18.000 millones de ayudas a Ucrania, pero su apoyo económico da signos de desgaste

El nuevo paquete de ayudas europeas quiere ayudar a Kiev a hacer frente a sus necesidades económicas más urgentes -el mantenimiento de los servicios públicos, los sueldos de los funcionarios, las pensiones...- a través de préstamos. Su desembolso está concidionado a reformas para reforzar el Estado de Derecho y la lucha contra la corrupción en el país y supondría nuevas emisiones de deuda avaladas por el presupuesto de la UE.

La iniciativa debe ahora debatirse entre los Estados miembro, algunos de los cuales ya han mostrado sus reticencias a este plan. Hungría ya ha anunciado que no apoyará la propuesta -que debe ser respaldada por todos los países europeos- y que dará apoyo a Ucrania por su cuenta.

Nueve meses después del inicio de la invasión rusa, crecen las voces que piden a Ucrania que se muestre abierta al diálogo con Moscú. Las economías europeas temen que el conflicto se alargue, en un contexto de crisis energética y con la inflación disparada. Por su parte, la Comisión Europea confía en que la iniciativa reciba finalmente el apoyo de los Veintisiete: «Hay reticencias, pero esperamos que se superen», ha asegurado el comisario de Presupuestos, Johannes Hanh.