Un nuevo tiroteo en un funeral en Wisconsin deja varias víctimas

La Policía ha pedido a los residentes de la localidad que eviten la zona y ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos. El cementerio limita con Osborne y Ohio al este y al oeste.

El alcalde de Racine, Cory Mason, ha anunciado la noche de este jueves que en respuesta al aumento de la violencia con armas de fuego en la ciudad de Racine, hasta el fin de semana, todos los menores de 18 años no podrán estar en las calles de la ciudad de 23.00 a 6.00 horas (hora local).

«El atroz tiroteo de hoy en un cementerio mientras una familia ya estaba llorando la pérdida de un ser querido es una nueva atrocidad de los autores de la violencia en nuestra comunidad. Hay que poner fin a la violencia, la venganza no es la respuesta. Acabar con la violencia de las armas es la máxima prioridad del Departamento de Policía y de mi Administración», ha subrayado Mason, tal y como recoge el diario local 'The Journal Times Racine'.

En este sentido, ha recalcado que ha mantenido una conversación con el Gobernador y el Fiscal General para solicitar más recursos para apoyar la prevención de la violencia en la ciudad.

«Estoy dando instrucciones al Departamento de Policía para que aplique activamente nuestra ordenanza de toque de queda para menores durante el fin de semana. Los menores de 18 años deben estar en casa antes de las once de la noche», ha agregado.

Por otro lado, el gobernador, Tony Evers, ha explicado en su cuenta de Twitter que ha monitoreado el tiroteo de este jueves en Racine y ha estado en contacto con sus socios locales para ofrecer apoyo. «Mientras esperamos información adicional, rezamos para que todos los implicados sobrevivan y se recuperen. La violencia armada tiene que parar», ha indicado.

Este suceso se ha producido un día después de que un hombre armado matara a su cirujano y a otras tres personas en el Hospital Saint Francis de Tulsa, en el estado de Oklahoma.

El 24 de mayo otro tiroteo dejó al menos 21 personas fallecidas, 19 de ellas niños y dos adultos, en la escuela de primaria Robb de la ciudad de Uvalde, en el estado de Texas, en el sur de Estados Unidos.