Las diez noticias imprescindibles de Burgos este lunes 20 de enero
Javier Milei y Georgia Meloni se carcajean durante la toma de posesión. AFP

Los invitados del populismo radical

La ultraderecha internacional, encabezada por los mandatarios de Italia y Argentina, asiste al juramento de su líder espiritual

Lunes, 20 de enero 2025, 20:31

Entre las columnas de los pasillos del Capitolio, dos de los mandatarios que representan el triunfo de la nueva ultraderecha global asistían ayer como invitados a la toma de posesión de Donald Trump. Giorgia Meloni, la primer ministra italiana, y Javier Milei, el presidente argentino, fueron dos de los máximos representantes de un país extranjero que recibían el honor de estar presentes en el evento en el que el apóstol del populismo volvía a sentarse en el sillón presidencial. No es una invitación inocente.

Publicidad

La presencia de los líderes de países extranjeros en este tipo de ceremonias solemnes no tiene precedentes en la historia de Estados Unidos, ya que en las tomas de posesión la representación de otras naciones se limita a una delegación diplomática. Pero con Trump todo es diferente. Además de Meloni y Milei, también estaban invitados los líderes de la ultraderecha global como el inspirador del Brexit, el británico Nigel Farage; el responsable de los neonazis de Alternativa para Alemania (AfD), Tino Chrupalla, o el presidente del partido belga Vlaams Belang, Tom Van Grieken. También debería haber estado uno de los sumos sacerdotes de este movimiento, Viktor Orbán. Sin embargo, el primer ministro húngaro no pudo acudir por problemas de agenda. Otro ausente fue el expresidente brasileño Jair Bolsonaro, procesado en su país y a quien un juez negó el derecho a salir.

Uno de los casos más curiosos en la lista de invitados de la ultraderecha es Eric Zemmour, el polemista que en las últimas elecciones galas concurrió con su recién fundado partido, Reconquista, y apenas obtuvo el 7% de los votos. Este agresivo representante del nacionalismo radical francés fue derrotado por la ultraderecha clásica representada por Marine Le Pen, que obtuvo el 23% de los sufragios. Sin embargo, para el equipo de Trump Zemmour es más interesante que Le Pen.

Esta preferencia francesa dice mucho de lo que hay detrás del liderazgo ultraderechista que pretende ejercer el presidente estadounidense. Zemmour tiene un discurso similar al de Le Pen en el fondo pero en las formas es un francotirador, alguien al que no le importa dinamitar las convenciones. Está más cerca de las provocaciones de Milei o del propio Trump.

La telaraña ultra

La aspiración 'trumpista' de crear una telaraña global de populismo extremo inspirada por el líder norteamericano no es nueva. En su primer mandato la representó el estratega Steve Bannon, que llegó a instalarse en Italia para adiestrar a las derechas europeas en las tácticas para llegar al poder. En el actual Gobierno, esa aspiración internacionalista la representa Elon Musk, quien no duda en apoyar desde su red social a cualquier partido de la ultraderecha europea o hispanoamericana que se ajuste a sus cánones. Su sueño es conseguir la derrota del progresismo haya donde se encuentre e imponer en el mundo una agenda liberal y antisistema.

Publicidad

En medio de esta internacional conservadora, el invitado más raro fue el comunista Han Zeng, el 'número dos' del presidente chino Xi Jinping. Pekín es el verdadero enemigo de Trump en su guerra comercial. Y el magnate sabe que con el gigante asiático no le funcionará el proselitismo.

Abascal, el único político español en el Capitolio

El único político español presente en el Capitolio fue el líder de Vox, Santiago Abascal. Estos días se ha fotografiado, entre otros, con el nuevo secretario de Estado, Marco Rubio, y con su amigo Milei. «En EE UU ha ganado el sentido común. Ganará en España también», escribió ayer en X, copiando el discurso de Trump.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas

Publicidad