Las batallas políticas más importantes de las elecciones estadounidenses

La batalla al Senado de Missouri es, según los encuestadores, la más reñida y difícil de predecir. Por eso Trump cerró allí la campaña con estrellas de Fox como Rush Limbaugh y Sean Hannity. El tirón de Trump con los evangélicos en el Cinturón de la Biblia podría acabar con la primera mujer del estado en llegar al Senado y una de las primeras senadoras en apoyar a Obama en 2008. Sin este asiento el sueño de recuperar el Senado se vuelve utópico.

El Kennedy de Texas va por detrás del senador Ted Cruz en todas las encuestas, pero a una distancia tan corta que permite soñar. No solo con recuperar el Senado, en el que no ha habido un demócrata texano en 25 años, sino con darle la vuelta al segundo estado más poblado del país. Sin él los republicanos tendrían un camino difícil hacia la Casa Blanca en 2020 y tendrían que replantearse sus políticas hacia los hispanos.

El alcalde de Tallahassee de 39 años al que Donald Trump ha atacado con saña podría convertirse en el primer afroamericano que gobierna Florida. Para vencer al racismo de blancos e hispanos cuenta con el entusiasmo que despierta entre jóvenes y afroamericanos, a los que ofrece ampliar el seguro médico del que disfrutan los jubilados como parte de una agenda progresista sin complejos forjada en la estela de Bernie Sanders.