El misil ruso disparado contra Dnipro causa una de las mayores matanzas de civiles de la guerra

En total, según Reznichenko, 39 residentes han sido ya extraídos con vida de lo que ha quedado de la parte central del edificio, aunque se estima que debajo de los cascotes hay todavía unas 40 personas. Se trata del ataque contra civiles más mortífero llevado a cabo contra la localidad de Dnipro. Las autoridades han decretado tres días de luto.

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, asegura que hay además 73 heridos, de los que 13 son menores, 72 apartamentos quedaron totalmente destruidos y más de 230 sufrieron daños. En el lugar se han instalado cuatro carpas del servicio estatal de emergencias de Ucrania y dos carpas más para voluntarios. Psicólogos también están involucrados en la atención a los heridos y a los familiares de las víctimas.

El asesor de la Presidencia ucraniana, Olerksiy Arestóvich, especuló el sábado con la posibilidad de que lo que alcanzó la vivienda de Dnipró fueron fragmentos de un misil ruso X-22, ya que creyó que fue previamente abatido por los sistemas de defensa aérea del Ejército ucraniano. Sin embargo, era evidente que tanta destrucción no puedo ser resultado de los restos del misil. Según el portavoz de la Fuerza Aérea ucraniana, Yuri Ignat, las publicaciones en las que Arestóvich se basó «eran erróneas debido a la precipitación con la que fueron difundidas». Lo que echó abajo una sección del edificio residencial de Dnipro fue un cohete de fabricación rusa X-22 utilizado habitualmente en ataques de la aviación contra portaaviones.

Por su parte, el comandante de la Fuerza Aérea ucraniana, Mykola Oleshuk, sostuvo en declaraciones a Ukraínskaya Pravda que sus país «no tienen armas capaces de derribar misiles X-22, uno de los cuales alcanzó un edificio de varios pisos en Dnipro». En el comunicado difundido por su departamento, se informa que «el 14 de enero de 2023, se dispararon misiles de crucero X-22 contra el territorio de Ucrania desde cinco bombarderos de largo alcance Tu-22M3 de las Fuerzas Aeroespaciales Rusas. Los lanzamientos se llevaron a cabo desde la región de Kursk y desde el Mar de Azov. A las 15 horas y 30 minutos del 14 de enero de 2023, uno de los misiles golpeó un edificio de gran altura», lo que refutaba la versión de Arestóvich. Oleschuk añadió que «la masa de la ojiva del X-22 es de unos 950 kilogramos, el alcance máximo es de hasta 600 kilómetros, cuando se usa desde largas distancias, la desviación del objetivo puede ser de cientos de metros».

El Ministerio de Defensa ruso comentó el sábado que el ataque con cohetes «logró el objetivo». La nota de prensa del ministerio ruso decía que «se llevó a cabo un ataque con misiles contra el sistema de mando y control militar de Ucrania y contra las instalaciones energéticas relacionadas. Todas las instalaciones designadas fueron destruidas. Se logró el propósito del ataque».

El primer ministro ucraniano, Denís Shmigal, declaró que «de los más de 30 misiles lanzados contra Ucrania, más de 20 fueron derribados». Según sus palabras, «sufrieron daños varias instalaciones de infraestructuras energéticas. En relación con esto, la situación más difícil se vive en Járkov y Kiev».

Mientras tanto, el presidente ruso, Vladímir Putin, manifestaba en declaraciones al canal público ruso Rossiya-1 que, tras la supuesta toma de Soledar por las tropas rusas, extremo que Kiev sigue negando, «la dinámica de la operación especial es positiva y todo se desarrolla según los planes del ministerio de Defensa y del Estado Mayor». «Espero que nuestros combatientes nos den más alegrías con sus buenos resultados en el campo de batalla», agregó.

En agosto del año pasado, la región de Dnipro ya fue objetivo de ataques, pero no tan mortíferos como los del sábado. Entonces fue la ciudad de Márganets y el poblado cercano de Mirovoe los objetivos de los cohetes 'Grad' rusos. Hubo 13 muertos y una decena de heridos. Un mes antes, en julio, un bombardeo con misiles causó en la ciudad ucraniana de Vinnitsa más de una veintena de muertos y medio centenar de heridos.