Secciones
Servicios
Destacamos
Las 'tops' españolas de los 90 Vanesa Lorenzo, Verónica Blume, Judith Mascó y Martina Klein han regresado a la pasarela para homenajear al diseñador Andrés Sardá, fallecido el pasado mes de septiembre a los 90 años. El tributo al pionero modista ha repasado la ... historia de la firma, desde sus inicios en los 60, cuando la empresa fabricaba mantillas de encaje. Entonces contaba entre sus clientas con Jackie Kennedy, que optó por una de sus delicadas piezas en su visita al Vaticano, concediendo a la familia catalana su primera exposición internacional. En aquella década, cuando el uso de las mantillas dejó de ser obligatorio en las iglesias, Sardá comenzó a usar encaje para ropa interior femenina, rompiendo con los estereotipos.
También han rememorado los 70, etapa en la que el británico David Hamilton se convirtió en el fotógrafo oficial de la casa. Su huella estética fue clave, a través de tules, tejidos fluidos, atmósferas sutiles y tonos empolvados. La tercera parte del desfile ha sido cuestión de tirar de archivo para mostrar las piezas que sacudieron los cimientos de la lencería en los años 80 y 90, confeccionadas en plástico, cota de malla metálica y la entonces innovadora lycra. Un valioso legado al que sabe sacar provecho con el máximo respeto Nuria, que, con la emoción a flor de piel, ha homenajeado a su padre con un espectáculo como a él le habría gustado.
La emoción también ha sido una constante en la propuesta de Roberto Diz. El modista gallego ha jugado con una metáfora sobre las migraciones humanas y la contaminación de los medios de transporte globales. Como si de un accidente aéreo se tratase, la silueta se desestructura, con sus característicos hombros en pico descolgados hasta la cintura para acentuarla. Los patrones se modifican con tiras elásticas que dan forma al cuerpo a modo de cinturones de seguridad. La lana y los tejidos de seda visten a los pasajeros de primera clase y el tul destrozado se rescata del fuselaje para los menos privilegiados en volúmenes formados por tejidos reflectantes. Destacan los enormes pendientes, fabricados con restos de basura para dar una carga más real al mensaje, que se ha acentuado con el gesto serio de las modelos, a las que Diz recordaba, antes de salir a escena, que no podían esbozar sonrisa alguna. «¡Estáis muy tristes y enfadadas!», repetía sin cesar el diseñador fetiche de las niñas 'bien' sevillanas.
Los tonos invernales también han acompañado a Miguel Marinero. Sus prendas de peletería tienen poco de discretas y se comen al resto de piezas de la colección pese a la excelente combinación en cada estilismo. Las mangas, inspiradas en los arcos del Mediterráneo, toman el protagonismo en napas acabadas en brillo, visones y trabajados tejidos de tapicería.
Para contrarrestar el luto de la jornada nada mejor que el rico imaginario de Agatha Ruiz de la Prada. La firma ha realizado una colección de kaftanes reversibles pensando en sus clientas maduras. El peluche reina en una propuesta en la que también tienen cabida el tejido vaquero y el estilo chandalero que introdujo en la marca Cosima, descendiente de la diseñadora. Pero el espectáculo no estaba solo sobre la pasarela, a la que han subido Mila Ximénez y Alejandra Rubio, hija de Terelu Campos. La orgullosa madre y la abuela materna de la joven, María Teresa Campos, han estado en primera fila sin perder detalle del evento junto a Paolo Vasile, amo y señor de Telecinco, y el 'superviviente' Omar Montes. Todos 'agatizados'.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.