Marisa Jara rompe su relación por sorpresa

Junto a Almansa, la sevillana, de 40 años, había recuperado la ilusión tras los problemas de salud que la llevaron a pasar por el quirófano para extirparle un tumor maligno cercano al colon en 2018 y un mioma en el útero solo un año después. Sus problemas de endometriosis también dificultaban las posibilidades de ser madre, pero junto al empresario habían vuelto a revivir esos deseos de maternidad y no dudaba en comentarlo hace apenas unos días a su llegada juntos a Madrid.

Jara reconoce que hay mucho cariño entre ellos y que, sencillamente, no ha podido ser, aunque en un principio se comentó que había sido una decisión de él debido a las numerosas discusiones entre ambos. Sea como fuere, esto no ha terminado con sus ganas de tener hijos y está abierta a todas las posibilidades, incluida la adopción.

La modelo sevillana, ahora también metida a diseñadora de joyas, no está acostumbrada a rendirse y lleva años plantando cara a diferentes adversidades. Desde el inicio de su carrera sobre la pasarela su peso ha sido motivo de comentarios y ella ha reconocido públicamente haber sufrido un trastorno de la alimentación. La comida se convirtió para ella en una tortura.

Con el paso de los años, Jara no solo ha superado la bulimia sino que se ha convertido en una modelo 'curvy' de renombre. Las curvas contra las que tanto luchó durante años por los estrictos cánones de belleza son ahora sus aliadas.

También ha superado dos tumores, uno de los cuáles le ha dejado una importante cicatriz en el abdomen que ella no ha dudado en lucir en biquini.