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Joaquina Dueñas
Jueves, 3 de junio 2021, 00:10
Desde que hace doce años le diagnosticaran fibromialgia a María José Campanario, han sido varias las ocasiones en las que ha tenido que ser ingresada por brotes de su dolencia. Según cuenta la revista Semana en exclusiva, la última habría sido a finales del mes ... pasado, pocos días antes del cumpleaños de la mujer del torero. Tal como indica la publicación, habría pasado más de diez días en el hospital San Juan Grande de Jerez. El propio Jesulín de Ubrique fue el que acudió a recogerla al centro médico el pasado 24 de mayo, apenas cuatro días antes de su 42 cumpleaños, que celebró el día 28.
María José y Jesulín llevan juntos dos décadas durante las que se han producido rumores de crisis en diferentes ocasiones, especialmente cuando ella tomó una serie de decisiones para labrarse su propia carrera profesional independiente de la de su marido que la llevó a estudiar odontología fuera del hogar familiar pero también después de los difíciles momentos provocados por su enfermedad. Sin embargo, parece que en esta ocasión, como en otras, el torero ha estado pendiente de su mujer durante todo el tiempo que ella ha permanecido hospitalizada aunque no ha podido estar con ella tanto como le habría gustado por los protocolos se seguridad anti Covid-19 de los centros sanitarios, así como por sus compromisos profesionales. Unos compromisos que le hacen viajar periódicamente a Madrid para la grabación de la segunda temporada de 'El Desafío' que se emitirá después del verano.
Campanario sufre fuertes dolores y, por sus publicaciones en redes sociales, también hemos sabido que tiene insomnio. Una situación que la incapacita durante las temporadas de crisis y que requiere de atención médica continuada. El momento más complicado lo pasó en el verano del 2017 cuando estuvo ingresada más de un mes en la clínica psiquiátrica El Seranil, en Benajarafe, un municipio de Málaga. Allí sorprendió por su imagen, lucía entonces una larga melena rubia, y por su estado de salud, ya que parecía incluso tener dificultades para moverse con agilidad.
Desde entonces son muy pocas sus salidas oficiales y no es fácil encontrarla en citas sociales o de publicidad aunque hemos sabido de ella a través de las exclusivas en su revista de cabecera o por sus propios directos en Instagram.
Acostumbrados a estar rodeados de polémica, los viajes del diestro a la capital por razones laborales también sembraron la duda sobre la relación de éste con su hija Julia. El matrimonio ofrecía una exclusiva sobre la mayoría de edad de la primogénita de la pareja pero no celebraban juntos tan señalada fecha. La razón parece que volvía a ser la pandemia y los cierres perimetrales autonómicos. Unos días después, una vez relajadas las medidas restrictivas, ambos viajaban a Madrid para reunirse con la joven y con su novio para celebrar el aniversario. A pesar de que se incrementó su movimiento en redes sociales durante las semanas previas y siguientes a su cumpleaños, parece que, finalmente, Julia habría decidido seguir los pasos de su hermana mayor, Andrea Janeiro, la hija que el torero tuvo con la televisiva Belén Esteban, y mantenerse en un segundo plano sin incursiones en los medios de comunicación.
En cualquier caso, la visita desmentía una posible mala relación de Julia con sus padres. Más aun, a primeros de mayo, Jesulín habría mantenido una discreta reunión con ella y con su hija mayor, Andrea, con la que, según ha relatado en varias ocasiones Belén, ha sido prácticamente inexistente, si bien, siempre puntualiza que siempre ha atendido las cuestiones económicas estipuladas en la separación.
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