Secciones
Servicios
Destacamos
el norte
Jueves, 9 de noviembre 2017, 13:21
El miércoles, 8 de noviembre, Telecinco emitía su programa 'Mi casa es la tuya' y, en esta ocasión, Bertín Osborne tenía como invitado a Boris Izaguirre, quien reside en Miami donde trabaja para la cadena Telemundo, pero que trasladó hasta su casa de Madrid para ... grabar el programa.
Boris ha hablado de su infancia, de la que ha contado que «el colegio insistió en que mi conducta generaba conflictos con los compañeros» y que «entre los 6 y los 10 años los obreros me gritaban 'maricón', pero claro, se lo decían a un niño y que me iba mal en la escuela porque me sentía superior a la gente. Era insoportable».
También recordó su etapa como guionista de telenovelas, como 'Rubí rebelde' o 'La dama de rosa', de lo que ha comentado que, «por más que sea agradable y amable, no soy capaz de amar profundamente», comentando sobre esto que «había un guionista con el que co-escribí varias telenovelas que me preguntaba si yo había amado. Al decirle que no, me decía que no podía escribir un culebrón sin haber amado».
El colaborador de 'Crónicas marcianas' no se ha olvidado de su actual pareja, Rubén, del que ha señalado que «me dijo: 'Para ti es muy importante ser famoso, pero a mí no me pongas nunca al lado ni al frente'. Eso supuso para mí mucho, porque me lo dijo antes de que yo fuera famoso, y nunca pude imaginar el nivel de fama que iba a alcanzar».
Durante su etapa al lado de Xavier Xardà cuando comenzó a ser famoso, confiesa que «en un momento determinado yo era la estrella del programa. Yo actuaba acorde a una estrella. Había veces que 'Crónicas' funcionaba dependiendo de lo que yo hacía. El programa marcó completamente mi vida y tengo un problema con eso. He hecho muchas cosas de televisión después, pero como si no hubiese hecho nada».
Cuando concluyó el programa, todo se volvió más complicado para Boris. Ninguno de sus proyectos salía adelante y, además, fue despedido de la Cadena Ser: «Estuve trabajando 17 años con Gemma Nierga. Ella me citó en un restaurante y me dice que tenían que prescindir de mis servicios porque la cadena consideraba que representaba algo que no era la onda en aquel entonces».
Esa falta de trabajo en España le llevó a aceptar una oferta de trabajo en Miami: «Me ofrecieron un contrato en Telemundo porque mi trayectoria en España les llamaba mucho la atención. Pese a ello, no sabían que querían hacer conmigo. Para mí, hoy en día aún me hace falta España. Creo que aquí se trabaja de manera más libre», aunque afirma que el cambio no le ha venido mal: «Duele. Me han cerrado puertas, sin duda. Llegué a crear un monstruo tan gigantesco que tuve que marcharme. Solo marchándome podía desprenderme de todo aquello. Tuve que empezar de nuevo otra vez. Fue una cura de humildad, lo que me hacía falta. Me dieron una bofetada en España y volví a bajar todos los escalones posibles y volví a salir».
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Carnero a Puente: «Antes atascaba Valladolid y ahora retrasa trenes y pierde vuelos»
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.