A la vista de los resultados obtenidos en las elecciones de ayer espero que al menos cuatro personas hayan pasado hoy, a estas tempranas horas, por las oficinas del INEM y hayan registrado su ingreso en el paro. Me refiero a Pedro Sánchez, a Albert ... Rivera, a José Luis Tezanos y a Iván Redondo. El primero por haber montado todo este circo de las cuartas elecciones en cuatro años, para obtener al final este desastre.

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Los españoles no tenemos que votar en unas quintas elecciones, quien tiene que votar es el PSOE, para desalojar a quien ya desalojaron. ¿Cuáles son sus méritos? Tres escaños menos para su partido, el país crispado, el Parlamento más troceado, Cataluña incendiada, los independentistas crecidos, su socio preferente (Unidas Podemos) mermado, su segunda opción (Ciudadanos) destrozada y eso sin hablar del paro y otras fruslerías... Y Albert Rivera debe irse a casa por haber matado la esperanza que generó y por haber convertido en superflua e incómoda a una opción que nació ilusionante.

José Luis Tezanos tiene que dimitir, pero no por haber fallado en su previsión -eso le pasa a cualquiera-, sino por haber contribuido decisivamente en el error de Pedro Sánchez y por haber tratado de condicionar los votos, olvidando que a él le pagan por reflejarlos y no por influirlos. E Iván Redondo, el asesor de Sánchez, por haber montado el espectáculo, sin prever los accidentes que iban a suceder a lo largo de la representación. Hasta los listos se equivocan. Un consuelo.

Pablo Casado no puede estar contento. Ha conseguido mejorar los espantosos resultados obtenidos en abril, lo cual es muy poco consuelo ya que no puede plantear una alternativa de la derecha, al no haber conseguido dirigir los votos que huían de Ciudadanos y que han recalado en Vox.

El que sí tiene motivos para brindar es Santiago Abascal, lo cual creo es una mala noticia para los demás. Quizás podría dimitir también Pablo Iglesias, a la vista de sus malos resultados, pero supongo que necesita el empleo para pagar la hipoteca del chalet. Un chalet con muy bajos intereses, pero con un coste terrible en votos. ¿Para quién ha sido una sorpresa que haya pasado de tener en su día más de 70 escaños a los escasos 35 de hoy?

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Pues nada. La salida de Sánchez debe ir acompañada de la abstención del PP y de los restos de Ciudadanos. La opción de Nadia Calviño como próxima presidenta que ayer era una excentricidad, hoy tiene mucho más sentido. En caso contrario, ¿qué le cederá Pedro Sánchez a Podemos, que le ofrecerá a ERC, a JxCat, al PNV y a EH Bildu para recibir su apoyo? Ayer no pudo/supo hacerlo. Pues hoy está más débil.

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