Los desahucios por el impago de hipotecas suben un 6,5%

En el primer trimestre del año, los desahucios repuntaron un 13,4% frente al mismo periodo del año anterior, hasta los 10.961. Y aunque el alquiler sigue copando este tipo de procesos, las familias con vivienda en propiedad también empiezan a notar problemas para hacer frente a su deuda. Los desahucios por el impago de hipotecas repuntaron un 6,5% en el periodo, hasta los 2.548 casos. Sigue siendo una cifra muy inferior a los 7.862 que suponen los alquileres (que ya representan siete de cada diez lanzamientos tras aumentar un 14% interanual). Pero la subida en el trimestre sobre las hipotecas es la primera en términos interanuales desde 2015.

Para analizar este repunte hay que tener en cuenta que las cifras se refieren a viviendas habitadas, pero también a fincas o locales. Del mismo modo, la comparativa coincide con el parón en los juzgados con el inicio del estado de alarma. Pero la subida es preocupante. Sobre todo porque, aunque muchos puedan ser procesos que se iniciaron antes de la pandemia, coinciden con la prohibición de desahuciar establecida por el Gobierno para los afectados «sin alternativa habitacional».

Si los datos se comparan con un año normalizado como el primer trimestre de 2019, la cifra de desahucios totales cae un 41,4%. Y los que se producen por el impago de hipotecas y «otras causas» son los que más contribuyen a este descenso en estos dos años. Pero las alarmas se han encendido con la nueva tendencia del primer trimestre, sobre todo ante el temor de que el final de medidas como los ERTE derive en un mayor número de despidos y, por lo tanto, en mayores dificultades para pagar las hipotecas, como ocurrió en la crisis de 2008. Es más, los datos del CGPJ reflejan también un notable aumento de las ejecuciones hipotecarias en el periodo analizado. Estos procesos no son exactamente un desahucio, sino el inicio del procedimiento por el que se reclama una propiedad y, solo si no se llega a un acuerdo, el proceso llega al juzgado para ordenar el lanzamiento. Pues bien, entre el 1 de enero y el 31 de marzo de 2021 se presentaron 7.280 ejecuciones hipotecarias, un 56,3% más que en el mismo trimestre de 2020 y la cifra más alta desde el segundo de 2017.

Hace solo unos días, el Instituto Nacional de Estadística (INE) se basaba en datos de la propiedad para cifrar el aumento de las ejecuciones solo sobre vivienda habitual (aquellas donde vive una familia) en un 84% hasta las 3.207. Ferran Font, director de estudios del portal inmobiliario pisos.com, recuerda que «el 52% de las ejecuciones aún son de hipotecas concedidas durante la burbuja inmobiliaria, entre los años 2005 y 2008.

Cataluña, con 2.437 (el 22,2% del total nacional) fue la comunidad en la que se practicaron más lanzamientos durante el primer trimestre de 2021. Le siguen Andalucía, con 1.778; la Comunidad Valenciana, con 1.553; y Madrid, con 1.033.

Atendiendo solo a los lanzamientos consecuencia de procedimientos derivados de la LAU, en el primer lugar aparece también Cataluña, con 1.835, cifra que representa el 23,3 por ciento del total; le siguieron Andalucía, con 1.109; la Comunidad Valenciana, con 1.025; y Madrid, con 847. En cuanto a los derivados de ejecuciones hipotecarias, el mayor número se dio en Andalucía, con 576, seguida por la Comunidad Valenciana, con 468, Cataluña, con 407 y Murcia, con 263.

La difícil situación por la que atraviesan los hogares también ha mantenido prácticamente invariable los casos por viviendas ocupadas. En concreto, en el primer trimestre de 2021 se registraron 791 asuntos verbales posesorios por ocupación ilegal de viviendas, cifra similar a la del mismo trimestre del año anterior, y se resolvieron 866. En Andalucía se presentó el mayor número de demandas, 195, que representan el 24,7% del total nacional. Le siguieron Cataluña, con 189; la Comunidad Valenciana, con 96, y Madrid, con 59.

Es la pescadilla que se muerde la cola. Sin un mercado laboral seguro, hacer frente a los compromisos con el banco resulta misión imposible con muchas familias. Aunque el paro bajó en mayo un 3,3%, aún quedan 545.000 desempleados más que antes del inicio de la crisis. Y los datos de solicitudes de concursos avanzan tiempos difíciles en este sentido.

Según las cifras del CGPJ, estos procesos cerraron marzo en 4.925, un 50,4% más respecto al mismo trimestre de 2020. Y aunque los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) disminuyeron un 38,6%, se han presentado 153 expedientes de este tipo. Y 34.461 demandas por despido, un 12,6% más que en el primer trimestre de 2020.