La situación laboral de las personas con discapacidad empeora en 2020 y 2021 como consecuencia del teletrabajo

Otra consecuencia de la pandemia que ha resultado negativa para las personas del colectivo es el teletrabajo, ya que «los puestos de trabajo donde hay mayor inserción laboral requieren presencia física y el teletrabajo no es una opción». En un momento en que la tecnología, lo online y lo digital han sido fundamentales, el colectivo de las personas con discapacidad lo han tenido muy consecuencia de la pandemia complicado tanto por falta de medios, como por falta de accesibilidad digital como por falta de conocimientos y formación en estas materias.

De esta manera en Burgos se ha trabajado con 76 usuarios con discapacidad dentro de su bolsa de empleo; de los cuales 36 son hombres y 40 son mujeres y se han realizado 18 contratos laborales en la provincia. No ha sido un año fácil aunque «en general se ha podido trabajar con normalidad, dentro de todas las medidas de seguridad y protocolos que existen. Lo que más ha cambiado es el contacto con las empresas, ya que casi no se hace nada de manera presencial y se gestiona casi todo por teléfono o de manera telemática», apunta la técnico de empleo de la entidad. La pandemia ha creado nuevas necesidades también en las empresas y un reflejo de ello se ha observado en el aumento en la contratación de personal de limpieza, siendo el sector con mayor oferta laboral junto con la industria. «Las empresas de limpieza están más abiertas a realizar los convenios de colaboración con el programa, pero son contratos o bien para cubrir bajas por COVID o por refuerzo, en ningún momento contratos indefinidos o con cierta duración», señala Rodríguez.