Los representantes de la patronal y los sindicatos ya advirtieron semanas atrás que la negociación del convenio del metal de Burgos no iba a ser ni rápida ni sencilla. Y lo cierto es que el guion está cumpliendo las previsiones al pie de la ... letra.
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De hecho, los avances son prácticamente nulos a pesar de haberse celebrado ya tres encuentros entre ambas partes, que de momento mantienen posturas radicalmente opuestas, sobre todo en cuanto al mantenimiento de la cláusula de revisión salarial vinculada al IPC.
Aunque no es el único, ese es el punto de la negociación que mayor conflicto está generando. Semanas atrás, la patronal del sector (Femebur) ya puso sobre la mesa su intención de eliminar la cláusula del convenio, lo que supone una línea roja para los sindicatos, a pesar de que sus representantes estén dispuestos a abordar otras fórmulas que garanticen en todo momento el poder adquisitivo de los trabajadores.
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Y en esas estamos. En la reunión celebrada ayer no se produjo ningún tipo de acercamiento. La patronal continúa planteando la necesidad de desvincular salarios del IPC, aplicando subidas salariales muy alejadas de las pretensiones iniciales de los sindicatos y los sindicatos no están dispuestos a ceder en ese ámbito.
De esta forma, la negociación se encuentra ahora mismo encallada. Habrá que ver si a lo largo de las próximas semanas se registra algún tipo de avance. De momento, ambas partes se han vuelto a citar para dentro de 12 días con el objetivo de intentar alcanzar puntos de encuentro.
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