El Gobierno culpa a las CC AA del retraso en el pago de los ERTE

«Hay comunidades autónomas que lo han enviado todo, sin hacer un cribado, sin discriminar, lo que ha provocado algunos cuellos de botella», reconoció este viernes en una entrevista en Canal Sur Radio, aunque dejó muy claro que «los ERTE se están pagando». En este sentido, justificó el retraso en el abono de algunas prestaciones en que el volumen de expedientes ha sido «una cosa absolutamente de récord», a lo que se ha unido la inacción de «muchas» autonomías.

«En un momento de teletrabajo se produce una parte importante del trabajo de cribado. Los ERTE se están pagando. Es verdad que se producen cuellos de botella porque hemos tomado una decisión muy importante. Es verdad que hay veces que hay huecos que no se cubren. Pero hemos sido muy preventivos», afirmó.

No es posible cuantificar cuántas personas siguen aún sin cobrar su prestación pero los sindicatos los cifran en «muchos miles».La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, quita hierro a este asunto y asegura que «hay pequeñas incidencias» en aproximadamente un 2% de los ERTE, algo que achaca a errores en los datos enviados, mientras que el 98% de los expedientes están ya reconocidos y pagados. Desde CSIF no están de acuerdo con estas declaraciones y resaltan que todavía hay cerca de 200.000 expedientes de ERTE sin resolver y, por tanto, 200.000 personas sin cobrar, además de «otro número significativo» de desempleados pendientes del abono de otras prestaciones extraordinarias de protección por desempleo aún sin cuantificar. Y es que quedan por tramitarse la protección al colectivo de empleadas del hogar, que aún no ha podido acometerse, además de las prestaciones ordinarias de la extensa carta de servicios del SEPE que ya se habían visto incrementadas exponencialmente antes de la pandemia y con motivo de la ralentización de la economía, según sostiene este sindicato, mayoritario enla Administración Pública.

Es por ello que se oponen a la reapertura de las oficinas del SEPE prevista para el próximo lunes ya que estos empleados públicos están recibiendo amenazas físicas y coacciones, algo que han denunciado este viernes ante un juzgado.

Y mientras tanto la negociación para alcanzar una acuerdo sobre una nueva ampliación de los ERTE sigue atascada. No hay por el momento ninguna reunión prevista y parece complicado que, como dejó caer la ministra, pueda celebrarse este fin de semana, según manifestaron este viernes a este periódico fuentes de los sindicatos. Los agentes sociales están a la espera de que el Ministerio les remita el documento escrito con la propuesta de Gobierno que verbalmente les trasladó en la última reunión del pasado miércoles, cuando les ofreció una ampliación hasta el 30 de septiembre pero para todos los sectores, mientras desde Trabajo se limitan a decir que lo están «ultimando».

Este retraso indigna a los empresarios, que ven «muy difícil» llegar así a un acuerdo antes del próximo martes, como pidió Yolanda Díaz, ya que el objetivo del Ejecutivo es aprobarlo en el próximo Consejo de Ministros. «Nuestra intención siempre es negociar, pero es muy difícil que lleguemos al martes si todavía, en este momento, no tenemos los papeles. Los de CEOE están, los de sindicatos están, pero no he visto papel del Gobierno», se quejó este viernes Garamendi en una rueda de prensa, en la que, no obstante, evitó hablar de este tema.

«Muy difícil» fue la palabra que repitió de forma reiterada, manifestando un cierto enfado por el retraso en el Gobierno de plasmarles por escrito la propuesta y, sin embargo, urgirles a llegar a un acuerdo antes del martes. «Es muy difícil que me hablen de flexibilidad y que se esté pidiendo a mi gente que tenga que trabajar el domingo, que llegue un papel el domingo por la tarde noche para que el lunes digamos que sí. Es muy difícil», reiteró.