El Gobierno trabaja en un borrador de la reforma de la financiación autonómica

En cualquier caso, la aprobación de la reforma del modelo de financiación está aún muy lejos y las posibilidades de que llegue a producirse en esta legislatura son escasas debido a la coyuntura política. Fernández de Moya ha recordado que las posturas de las comunidades varían incluso entre aquellas que tienen el mismo color político. «Quiero decirle al PSOE que se ponga de acuerdo sobre qué hacer con los impuestos en la reforma de la financiación», ha señalado.

En este sentido, el secretario de Estado de Hacienda ha recordado la necesidad de llegar a un acuerdo con el principal partido de la oposición para el cambio de este sistema y también ha criticado la ausencia de Cataluña a las reuniones técnicas a las que decidió no enviar ningún delegado mucho antes de la aplicación del artículo 155 de la Constitución.

Además de las diferencias sobre los impuestos cedidos como Patrimonio o Sucesiones (donde algunas comunidades como Madrid los tienen bonificados casi al 100% y otras no) otro de los puntos más complicados tienen que ver con la reestructuración de la deuda autonómica en manos del Estado (supone más de la mitad del total). Un volumen que ha aumentado en algunas regiones debido a la financiación de mecanismos extraordinarios como el FLA y el plan de pago a proveedores.

En cualquier caso, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ya admitió que la reestructuración de la deuda está sobre la mesa, aunque debe definirse su alcance para evitar las quejas de las comunidades más saneadas y que no ha necesitado utilizar esas herramientas de forma tan abundante. En principio, la idea del Gobierno es alargar los plazos de vencimiento y reducir los intereses.

Por otra parte, Fernández de Moya ha adelantado los datos de recaudación de algunos impuestos en el primer trimestre del año. En concreto, los ingresos procedentes de las rentas del trabajo del IRPF se han elevado un 6,7% y la recaudación del IVA hasta marzo se ha incrementado un 4,4%. Con esta evolución, el secretario de Estado ha defendido la viabilidad de la previsión de ingresos recogida en los Presupuestos de 2018 y que supone un aumento del 6% hasta alcanzar una cifra récord de 210.000 millones.