La recaudación de impuestos crece el doble en Castilla y León que en el conjunto del país

Los ingresos totales del Estado en la comunidad alcanzan la cifra de 1.584,6 millones de euros hasta junio, el 6,2% por encima de la registrada en el mismo periodo del año pasado y cerca del doble de la tasa de incremento de los ingresos totales del país (6,2% - 3,8%).

Sin embargo, pese a la recuperación económica, la recaudación tributaria se encuentra aún unos 516 millones de euros por debajo del valor alcanzado antes del comienzo de la crisis, lo que supone un 24,5% menos que lo ingresado por fiscalidad en las mismas fechas en el ejercicio de 2007, cuando se superaron los dos mil millones.

¿Cómo se ha repartido la recaudación del Estado en la región? Los ingresos en concepto del Impuesto sobre el Valor Añadido son los que han marcado el buen balance recaudatorio en Castilla y León. 707,2 millones de euros recaudados por la AEAT en la comunidad suponen un incremento del 12,3%, mientras en la media nacional solo es del 3,4%.

El consumo de los castellanos y leoneses previsiblemente se ha acelerado con la ayuda del incremento de dinero disponible en los bolsillos. El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, mientras, también tiene un buen comportamiento. La tasa de crecimiento marca un 6,4% y, aunque está algo por debajo de la media de España (7,5%), con 670 millones, es el segundo impuesto por el que más dinero percibe el Estado en la comunidad autónoma.

Sociedades, dentro de los grandes gravámenes, es el que peor ha respondido, pero sin grandes cambios. En este periodo, el impuesto que pagan las empresas por sus beneficios deja 122,6 millones de euros para la AEAT en la comunidad, el 0,6% menos que en el mismo periodo de 2017, cuando por estas fechas el incremento era del 29,7%. El dato es menos negativo en el global pues, en el total del país, cae el 21,9%. Los impuestos Especiales y el Tráfico Exterior son los peor parados, con descensos en sus recaudaciones del 32,8% y 43% respectivamente.

La Agencia Tributaria señala en el informe general de junio que la causa principal del crecimiento en el primer semestre del año fueron los ingresos por IRPF, particularmente los procedentes de las retenciones del trabajo. Explica que «el crecimiento fue anormalmente elevado por el desplazamiento de ingresos a junio debido a la celebración en mayo de algunas fiestas locales en la fecha límite de presentación de las autoliquidaciones». Los ingresos totales en el mes señalado ascendieron a 8.323 millones, lo que supuso un incremento del 3,3% (266 millones) respecto a los de 2017. En el acumulado hasta el primer semestre de año, por su parte, el aumento de los ingresos es de un 3,8%.

Por otro lado, los cambios normativos que afectan a la recaudación, vigentes hasta la fecha tuvieron un impacto que ocasionó la resta de 533 millones a las arcas del Estado. El mayor impacto corresponde a la implantación del sistema de suministro inmediato de información (SII). Sin su efecto, el crecimiento del mes de junio sería del 5% y los ingresos acumulados marcarían una tasa de mejora del 4,5%.

En la recaudación total, con Castilla y León como la quinta comunidad que más crece con una variación positiva del 6,2%, el mapa autonómico se muestra diferenciado pero sin grandes estridencias. El mayor incremento se sitúa en Navarra, con el 31%; lo contrario que ocurre en Cantabria donde el descenso en la recaudación es del 49%. El resto de comunidades presentan diferencias con el mismo periodo del año anterior pero no exceden, por aumento o por caída de ingresos, porcentajes del 10%.

En las provincias, en el primer semestre el IRPF lleva la batuta de la recaudación tributaria, ya que aumenta en todas ellas con respecto al pasado año. Salamanca consigue el mejor balance con una tasa de variación del 18,8%. Por otra parte, los ingresos por concepto de Sociedades se presentan más irregulares en la comunidad. Soria registra el mayor incremento y la recaudación se dispara hasta el 54,7% más; Ávila, en el lado opuesto, sufre el descenso más acentuado con una caída del 27,4%.

En cuanto al IVA, en Soria se apunta la mayor inyección de dinero con un 14,8% más. El foco también se sitúa en Valladolid, donde el aumento ha sido notorio. La Agencia Tributaria elude comparar el crecimiento de cifras por disparidad en los ritmos de contabilización, pero solamente la cantidad de 119,8 millones de euros recaudados, que supone más del doble de lo que se llevaba el año pasado por estas fechas, ya da una idea de la buena evolución del consumo vallisoletano.

Los datos sobre la recaudación por los tributos propios de la comunidad, léase Transmisiones Patrimoniales o Sucesiones y Donaciones, en 2018 todavía se desconocen. La Junta no ha presentado aún las cifras actualizadas para el presente ejercicio.