El plan para limitar el precio del gas se retrasa una semana

A su llegada al consejo extraordinario de ministros de Energía de la UE, reunidos ayer en Bruselas, la ministra se mostró confiada en que, pese a la complejidad de los detalles para recibir el aval definitivo de la Comisión, la medida se podrá aprobar «la semana que viene».

España y Portugal ya pactaron un «acuerdo político» con Europa para topar en 50 euros de media el megavatio hora (Mwh) del precio del gas que se utiliza para generar electricidad, para que eso se traduzca en una reducción de los precios minoristas. Y es que si los ciclos combinados, que representan un 18% del mix necesario para cubrir toda la demanda de luz en el último año, ofrecen su energía a ese precio limitado, el 'pool' también se verá reducido. Y los primeros que lo notarían serían los clientes del mercado regulado (el denominado PVPC), pues su tarifa está vinculada a ese mercado.

La rebaja conseguida por Madrid y Lisboa, que en principio tendrá una aplicación de 12 meses, resulta notable frente a los 90 euros a los que ahora se mueve el gas en el mercado. Pero es menos ambiciosa que la propuesta inicial de 30 euros que habían defendido en un principio España y Portugal.

Las reticencias mostradas por algunos socios europeos, especialmente por Alemania, y la presión de buena parte del sector eléctrico para evitar la propuesta, obligó a ceder a los Ejecutivos ibéricos en este sentido.

Pese a ello, y con el pacto político bajo el brazo, no hay riesgo de que la medida no se ponga en marcha en las próximas semanas, aunque el hecho de que su aprobación definitiva en consejo de ministros vaya a retrasarse implica que el consumidor también tardará más en notarlo en la factura.

En concreto, la propia Teresa Ribera explicó la pasada semana que confiaba en que la medida tuviese impacto ya en el recibo del mes de mayo.

Un objetivo que ahora se torna complicado ya que, si finalmente la 'excepción ibérica' recibe luz verde en el consejo de ministros del próximo martes 10 de mayo, los ciudadanos no podrán notar su pleno efecto hasta la factura de junio, cuando ya haya pasado un mes completo de consumo con la medida en vigor.

Pese a ello, desde el Ministerio de Transición Ecológica defiende que el plan será suficiente para rebajar el coste de la electricidad en el mercado y en su traslación al precio que asume el consumidor final.