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Los españoles han vuelto a consumir. Después del frenazo del segundo trimestre del año, el aumento de la demanda nacional de julio a septiembre mantiene el crecimiento de la economía en el 0,4%, la misma tasa que el trimestre anterior, lo que significa ... que sigue marcando su menor ritmo de crecimiento en tres años. En tasa interanual también se mantienen los valores, con un crecimiento del 2% en todo el año, el mismo que el trimestre anterior y en línea con las previsiones marcadas por el Gobierno ante Bruselas.
Así, según el avance de la Contabilidad Nacional publicado este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE) del tercer trimestre, mejoran tanto el consumo como la inversión, aunque empeora el comportamiento de las exportaciones respecto a la subida del periodo precedente. El gasto en consumo subió un 1%, nueve décimas más, lo que probablemente esté relacionado con las rebajas en las tiendas y el mayor consumo que se realiza en los meses de verano.
El gasto público destaca por experimentar una subida del 0,9%, medio punto más que en el segundo trimestre, a lo que se suma el gasto en consumo de las instituciones sin ánimo de lucro, que creció un 2%, más del doble que el periodo anterior.
Más llamativo es el crecimiento del 7% de la inversión empresarial (maquinaria y bienes de equipo), cuando un trimestre antes caía el 1,7%, en tanto que la inversión en vivienda y construcción se desplomó el 2,6%, frente al aumento del 0,5% del segundo trimestre.
La guerra comercial sigue afectando a la compraventa de productos alrededor del mundo. Esto se refleja en la caída de las exportaciones en el tercer trimestre en ocho décimas, mientras que en periodo anterior subían el 1,7%. Por parte de las importaciones, aumentaron su ritmo cuatro décimas, al 1,3%, el línea con el aumento del consumo interno.
«La economía va a seguir creciendo, aunque menos que antes», explica a este periódico Javier Díaz-Giménez, profesor de Economía del IESE. En su opinión, lo que más se va a notar es en la caída en el crecimiento del empleo, aunque no cree que haya que ser alarmistas: «No vamos a crear los 500.000 puestos al año de antes, pero mientras se siga por encima de 200.000, no hay que preocuparse», asegura. Así, el profesor recuerda que si la economía cierra el año en el 2% supondrá cuatro décimas menos que el año pasado, lo que significan 5.000 millones de euros de diferencia: «No es tanto en una economía de un billón», sentencia.
De hecho, los datos del INE revelan que el empleo no mostró su mejor cara en el tercer trimestre. En puestos de trabajo a tiempo completo, cayó siete décimas su crecimiento interanual hasta el 1,8%. Este ritmo supone crear 332.000 puestos de trabajo en 2019, prácticamente la mitad que los años anteriores; es la tasa de crecimiento más baja desde hace cinco años.
Por sectores, la industria es donde más creció el empleo (+1,2%) hasta situarse en un crecimiento del 2,6% hasta septiembre. Por el contrario, la construcción cae un 2,8% hasta el 2,2% de avance en los nueve primeros meses del año. Es curioso que la rama de los Servicios, que en los meses de verano tiende a crecer, este año disminuye ocho décimas respecto al trimestre anterior hasta el 1,9%. El sector primario sigue su caída hasta situarse en el -1,7%.
El experto asegura que aunque la construcción es un sector que se está ralentizando, no se producirá el desplome que ocurrió en la crisis de 2007, ya que en ese momento se había creado una burbuja inmobiliaria que empujó a crear un millón de casas al año en España, mientras que ahora los niveles medios están en 250.000. «Por mucho que se frene el sector, no se producirá el mismo efecto que hace diez años ni en el sector ni en la destrucción de empleo», explica Díaz-Giménez.
A pesar de la ralentización de la creación de empleo, la remuneración de los trabajadores crece un 4,6% en el tercer trimestre, aún así seis décimas menos de lo experimentado en el periodo precedente, resultado de que el aumento del número de asalariados es del 2,3%, cuatro décimas menor que tres meses antes.
Los países de la eurozona siguen creciendo, aunque a un ritmo muy bajo. Concretamente, la zona euro volvió a expandirse un 0,2% en el tercer trimestre, lo mismo que en el anterior, según los datos publicados este jueves por la oficina estadística Eurostat. Ello supone que España crece el doble que la media de sus socios europeos.
España es el único país que crece por encima de la media (+0,4%), junto con Francia (+0,3%), y con una Alemania que lastra los resultados globales con una economía que podría haber entrado ya en recesión técnica si se confirma que volvió a obtener tasas negativas en el tercer trimestre del año.
En el conjunto de la UE, el PIB creció un 0,3%, una décima más que en el segundo trimestre, un dato mejor del previsto por los analistas.
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