Alemania y Reino Unido se asoman a la recesión y debilitan la eurozona

Precisamente al conflicto entre EE UU y China es a lo que culpan los expertos este retroceso del PIB. Y es que el derrumbe de las exportaciones y la producción industrial, sus dos grandes pilares, arrastraron a la economía alemana al borde de la recesión tras dos trimestres (no consecutivos) en tasas negativas. Las malas cifras llevaron al Ministerio de Economía alemán a rebajar a la mitad su pronóstico de expansión para 2019 hasta el 0,5%, el peor dato desde 2013 como consecuencia de las tensiones comerciales y la incertidumbre en torno al 'brexit'.

Y al país del 'brexit' es a los que tampoco les han dado buenas noticias macroeconómicas este miércoles. La oficina comunitaria de estadística Eurostat confirmó que el PIB de Reino Unido se contrajo un -0,2% en el segundo trimestre del año, una caída de siete décimas respecto al +0,5% registrado en los tres primeros meses del año, lo que deja la tasa interanual en un discreto 1,2% de crecimiento.

Tampoco Francia tira de la eurozona. Vio frenada su expansión en el segundo trimestre al 0,2%, una décima menos que en los primeros tres meses como consecuencia de la moderación del consumo de los hogares. Por su parte, el PIB de Italia, hasta ahora la tercera mayor economía del euro, se estancó entre los meses de abril y junio y los datos de Eurostat revelan un avance plano, del 0,0%.

Con estos datos sobre la mesa, destaca el caso de la economía española, que a pesar de crecer dos décimas menos en el segundo trimestre que el anterior (0,5%), mantiene un avance del PIB bastante superior a la media de la eurozona, más del doble en tanto en tasa trimestral como interanual, ya que nuestro país crecerá un 2,3% en 2019 según las estimaciones, frente al 1,1% del conjunto de los países del euro, su menor ritmo expansivo desde finales de 2013.

Y es que el PIB de los Diecinueve se frena a la mitad en el segundo trimestre, con una expansión de solo el 0,2% frente al 0,4% de los tres primeros meses del año. Por otro lado, en el conjunto de la Unión Europea (UE), la economía creció también un 0,2%, tres décimas por debajo del primer trimestre. A nivel interanual, la expansión es del 1,3%, dos décimas menos que en el primer trimestre y su peor dato desde finales de 2013.

Así, Europa vuelve al terreno del crecimiento frágil tras el respiro del primer trimestre, acompañado de un débil crecimiento de la inflación, que volvió a bajar de abril a junio hasta situarse en el 1,1%, según los datos publicados por Eurostat.

A pesar de la desaceleración económica, la buena noticia llega por el lado laboral. Los datos de Eurostat revelan que la zona euro siguió creciendo en empleo en el segundo trimestre llegando al mayor número de ocupados de la historia con 159,93 millones de personas trabajando, lo que suponen 1,8 millones más que en el mismo periodo del año pasado.

Tanto en la eurozona como en la UE la tasa de ocupados creció un 0,2%, dos décimas menos que en el primer trimestre, aunque el empleo crece un 1,1% en tasa interanual. En el caso de la UE, la cifra de ocupados también alcanzó en el segundo trimestre un nuevo máximo, hasta los 241,32 millones, con un incremento de 2,37 millones en un año.

Así, en comparación con el primer trimestre de 2008, cuando se registraron los mejores datos de empleo antes de la crisis, la cifra de ocupados ha aumentado en unos 5 millones de personas en la zona euro y en 9,9 millones en la UE.

España sigue siendo de los países con mayor tasa de paro (14%), solo superado por Grecia (17,6%). Por detrás, Italia (9,7%) y Francia (8,7%), aún por encima de la media. En el extremo contrario, Alemania (3,1%) y Holanda (3,4%), países que ya pueden considerarse con pleno empleo.