La Autoridad Fiscal cuestiona la reforma de las pensiones al disparar el gasto

En su informe sobre la sostenibilidad de las Administraciones Públicas a largo plazo y el impacto de la demografía, indican que el gasto en pensiones aumentará en 2,6 puntos (unos 30.000 millones) desde su tasa actual (13,6%), hasta 2050, cuando cerrará con un nivel del 16,2% del PIB. Este incremento del gasto se explica principalmente por factores demográficos, indica la Airef. Y más a largo plazo calculan que el gasto en pensiones sea del 13,9% del PIB aún en 2070, lo que confirma que la reforma de Escrivá -que fue presidente de este organismo de 2014 a 2020, cuando fue nombrado ministro- no podrá compensar los mayores gastos frente a unos ingresos que también subirán pero no a ese nivel.

En concreto, los cálculos de la Airef indican que el gasto subirá un 2,4% de cara a 2050, sobre todo por la revalorización de las pensiones con el IPC y la eliminación del factor de sostenibilidad. Los ingresos aumentarán un 1,3%, sobre todo por la reforma de las cotizaciones en el sistema de los autónomos y la evolución de las bases máximas de cotización. Con todo, el impacto sobre el déficit de la reforma es de 1,1 puntos en 2050.

Además, este incremento del gasto en pensiones y también en dependencia y sanidad debido al envejecimiento poblacional supondrá que -sin medidas de política económica ni reglas fiscales- llevará a la deuda pública al 110% en 2035, que seguirá ascendente hasta el 147% en 2050 y al 186% en 2070, último año de proyección del organismo.

«La deuda registrará un punto de inflexión en 2030, cuando comenzará una senda muy ascendente», explicó la presidenta de la Airef, Cristina Herrero, durante la presentación del informe.

Todo porque el saldo demográfico es muy negativo en España, con una tasa de natalidad que actualmente (1,19 hijos por mujer) es una de las más bajas del mundo, con regiones donde la tasa ya es menor de uno, como en Asturias. Es muy inferior a la media de la zona euro, de 1,5 hijos por mujer, y también está por debajo de los 2 hijos que, según una encuesta del INE, es el ideal de la media de las mujeres españolas.

En cambio, la esperanza de vida en España es una de las más altas del mundo, sobre todo en el caso de las mujeres, y la Airef calcula que irá ascendiendo las próximas décadas hasta alcanzar los 89,1 años en 2070, lo que multiplicará los gastos en dependencia, sanidad y pensiones.

El ministro José Luis Escrivá negó que el informe de la Airef suponga una crítica a su reforma. Al contrario, mostró su complacencia por las recomendaciones que hace al Gobierno, que, a su juicio, son «absolutamente razonables y sensatas». De igual manera, sostuvo que sus proyecciones de estimación del gasto y los ingresos a largo plazo «coinciden» con sus números en alguno de los escenarios que plantea, puesto que otros se han quedado «desfasados» por los efectos de la reforma laboral y las mejores dinámicas económicas. «La valoración que hago del informe es positiva», concluyó.

Más allá de las pensiones, la evolución del envejecimiento demográfico también repercutirá en los gastos en sanidad y en educación. En sanidad, el gasto se estabilizaría en torno al 8,4% del PIB a partir de 2049, mientras que en cuidados de larga duración lo haría en torno al 2% alrededor de 2060. Por el contrario, en educación se observa una caída del gasto hasta un 3,6% en 2041 y una posterior recuperación hasta el 4,2% del PIB en 2070, según la Airef.

La presidenta reconoció que hacer una reforma de las pensiones «no es fácil», pero que su papel desde la Airef es analizar la sostenibilidad del sistema. Y en este sentido, destacó que esta reforma «aumenta el déficit y por tanto aumenta la deuda».

Herrero resumió los dos factores que más hacen subir el gasto de la reforma: la actualización de las pensiones conforme al IPC y la eliminación del factor de sostenibilidad. Y ya que el Pacto de Toledo acordó la subida con el IPC, indicó que una de las formas de haber aumentado ingresos es retrasar la edad de jubilación o aumentar el número de años necesarios para cobrar el 100% de la jubilación, algo que esta reforma no ha tocado.