El panel de expertos de PwC mejora su previsión de crecimiento al 6,3%

Así se desprende de la última encuesta de PwC entre expertos, empresarios y directivos. Un documento trimestral que sirve para tomar el pulso a las perspectivas económicas y que en su última edición deja más que buenas sensaciones. En concreto, el panel de expertos ha revisado en ocho décimas su previsión sobre la economía española, con un crecimiento esperado del 6,3% para este año. También mejoran en seis décimas la estimación para 2022, hasta el 5,4%.

La consultora, que elabora este 'Consenso Económico' desde 1999 a partir de la opinión de un panel de más de 400 expertos, alinea así sus previsiones con las del Gobierno, que estima un repunte económico del 6,5% para este año.

El consumo será clave en este sentido. Aunque muchas voces advierten del temido 'efecto champagne' después del verano, el 82% de los consultados piensa ahora que el consumo va a aumentar en los próximos seis meses y el 54,5%, que también lo hará la venta de vivienda. Apenas un 2% piensa que el consumo caerá en el periodo.

Los datos, de momento, invitan al optimismo. Según el indicador CaixaBank de consumo, que incluye el gasto con tarjetas emitidas por CaixaBank, el gasto de no clientes en TPV CaixaBank y los reintegros en cajeros CaixaBank, cayó un 1% con respecto al nivel de referencia pre-Covid en el promedio del segundo trimestre, siete puntos menos que el descenso del 8% experimentado en el primer trimestre del año.

Dicho indicador es todavía negativo a causa del gasto con tarjetas extranjeras, que registró una caída del 52% con respecto al nivel de referencia pre-Covid en el promedio del segundo trimestre, si bien CaixaBank indica que el gasto con tarjeta extranjera dejó entrever signos de reactivación durante mayo y junio.

De su lado, la actividad de las tarjetas españolas creció un 4% respecto a niveles pre-Covid, frente al retroceso del 4% del primer trimestre.

La encuesta de PwC también cuestiona a los directivos y expertos sobre las medidas que se deberían tomar para avanzar en la despedida definitiva de la crisis. Y ante la evidencia de que la subida de la deuda pública es uno de los principales temores para este año, los consultados consideran que subir los impuestos para compensar esa situación es un grave error.

A cambio, abogan por establecer medidas de ajuste del gasto público corriente y potenciar la lucha contra el fraude fiscal. En concreto, más del 68% de los encuestados está en contra de una subida de impuestos generalizada.

La mayoría también son partidarios de la supresión del impuesto de Sucesiones y Patrimonio, y sí son más positivos con la idea de potenciar la fiscalidad medioambiental, uno de los grandes compromisos con Bruselas para este año, y que el Gobierno ya ha puesto en marcha con la iniciativa de gravar plásticos no reutilizables y residuos en vertederos e incineración, con el objetivo de reducir en un 15% la generación de desechos en 2030 respecto a 2010.