Secciones
Servicios
Destacamos
El bono español a diez años se ha subastado con un interés negativo por primera vez en la historia. En concreto, el interés marginal con el que el Tesoro ha colocado su emisión de deuda con vencimiento dentro de una década ha sido de ... un -0,016%. Ello significa que el instituto emisor ha cobrado por primera vez por una colocación a diez años. Según ha valorado el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, este descenso en la rentabilidad «ratifica la confianza de los inversores en la eficacia de las medidas adoptadas por el Gobierno español» y «es también un mensaje de confianza en la recuperación y futuro de la economía española».
En concreto, el Tesoro ha colocado 921 millones de euros en este vencimiento a diez años. En la subasta previa de la misma referencia, que se celebró el 1 de octubre, su interés se colocó en el 0,230%.
Con la operación protagonizada por el Tesoro español esta mañana, se afianza además la reducción de los tipos de interés de la deuda española, que en noviembre registraron nuevos mínimos históricos: el coste de la deuda en circulación se sitúa en el 0,18% y el tipo del stock de deuda se situó en esas mismas fechas en el 1,86%.
Si bien el Tesoro es la primera vez que cobra por una emisión de deuda a diez años, no es ésta la primera ocasión en que los inversores compran títulos españoles con rendimiento negativo. El instituto emisor colocó letras a tres meses a tipos negativos por primera vez en abril de 2015. En la última emisión de esta denominación, el interés medio fue de un -0,62%. Y lo que es más: la última subasta de bonos a cinco años fue con un rendimiento del -0,414%, como promedio.
En el mercado secundario, es decir, en el que cotizan las emisiones de deuda y son intercambiadas entre los inversores, el bono español aún no ha entrado en negativo, pero su rentabilidad cae a la mitad desde los niveles de cierre de ayer, al retroceder desde el 0,02% hasta el 0,01%.
Ello coincide con la jornada en la que el Banco Central Europeo celebra su reunión ordinaria de política monetaria en que se prevé que aumente la dotación de su programa extraordinario de compra de activos que se puso en marcha con el inicio de la pandemia y sus primeros impactos en la economía.
La rentabilidad de la deuda doméstica a diez años comenzó 2020 en el 0,47%. Marcó su máximo anual en el 1,23% el 18 de marzo, coincidiendo con uno de los momentos de mayor tensión provocada por la pandemia. La decisiva actuación de las autoridades monetarias ha reducido al mínimo las referencias que da el mercado sobre los costes de financiación del Tesoro. Lejos se encuentran los niveles del 7,5% que llegó a marcar en el verano de 2012, en plena crisis soberana europea.
Toda la curva de la deuda española está en negativo hasta los nueve años de duración.
La emisión de deuda neta por parte del Tesoro en este ejercicio se situará, según informó Economía hace unos días, en los 110.000 millones de euros. Ello supone un recorte de 20.000 millones de euros respecto a la estimación realizada en mayo sobre las necesidades adicionales motivadas por la crisis sanitaria.
Con vistas a 2021, el Gobierno recoge en los Presupuestos Generales del Estado que la emisión bruta rozará los 300.000 millones y la neta igualará prácticamente la de este 2020, colocándose en los 110.000 millones.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.