El Ibex-35 se despide de los 9.000 por la presión de la banca y de los grandes valores

Pero el peor de todos los indicadores del Viejo Continente fue el Ftse 100 británico, que retrocedió un 0,89%, seguido del Cac 40 francés, que cayó un 0,51%. El PSI-20 de Lisboa se dejó un 0,20%. El Dax alemán y el Ftse Mib de Milán bajaron un 0,09% y un 0,07%, respectivamente.

Pérdidas en Europa, y eso que los datos económicos en la sesión de este martes batieron expectativas: el índice de gestores de compras del sector servicios para octubre se revisaba al alza desde los 53,3 hasta los 53,7 puntos. Y el índice compuesto, que incluye también al sector industrial, pasaba desde los 52,7 hasta los 53,1 puntos.

Los índices americanos, el día de las elecciones de mitad de mandato, se movían al alza. Así, el Dow Jones y el Nasdaq avanzaban alrededor de medio punto porcentual al cierre de la sesión europea, mientras que el S&P 500 se anotaba un 0,26%.

En el selectivo español pesaba en contra el sector financiero, que se movía a la baja, aún a la espera de la decisión del Supremo sobre quién ha de pagar el impuesto sobre las hipotecas, si las entidades o los clientes, y en caso de que sean las primeras, si con retroactividad (y cuánta), o no. El Tribunal Supremo lleva reunido dos días sin haber llegado aún a una conclusión. El peor de los bancos fue el Sabadell, que retrocedió un 1,38%, mientras que Bankia y el Santander se dejaron un 1,14%, respectivamente. Bankinter y BBVA, por su parte, retrocedieron un 1,05% y un 1%, respectivamente.

Además, contra el Ibex-35 también jugaron otros valores, como Inditex (-1,07%), así como Telefónica (-1,20%) o Repsol (-0,45%). Aunque el peor valor de la jornada fue Dia, que retrocedió un 7,05%, mientras que Técnicas Reunidas retrocedió un 1,88%, y Grifols, un 1,48%. Y también más de un punto porcentual bajaron ACS y Mapfre.

En verde, sin embargo, terminó Siemens Gamesa, que lideró las ganancias del indicador: tras presentar sus resultados del tercer trimestre se disparó alrededor de un 15%. A continuación se colocaba Mediaset, con un avance del 4,69%. Después, Naturgy, Endesa, Red Eléctrica y Enagás, que se apuntaron más de dos puntos porcentuales.

En el mercado de divisas, el tipo de cambio entre el euro y el dólar se mantenía prácticamente en tablas respecto al cierre de ayer, en niveles en torno a 1,1415 unidades. En el mercado de deuda, la rentabilidad del bono americano a diez años se mantenía en el entorno del 3,20%; el de su comparable alemán, en el 0,43%.

Sí subía el rendimiento del bono italiano: del 3,32% hasta el 3,40%, después de que ayer el Eurogrupo insistiera en que el Gobierno italiano tiene que enviar a la Comisión un nuevo presupuesto que cumpla con las reglas presupuestarias de la zona euro. Además, el Gobierno italiano ha planteado una cuestión de confianza en el Parlamento, porque las medidas anti-inmigración y contra la corrupción han provocado tensiones y discrepancias entre la Liga y el Movimiento Cinco Estrellas. Los disidentes de este último podrían enfrentarse a su expulsión en el caso en que voten contra el Gobierno. Se da la circunstancia de que en el Senado la coalición de Gobierno tiene una mayoría bastante estrecha.

En el mercado de materias primas, caídas de nuevo para el petróleo. El barril de Brent, de referencia en Europa, perdía un 2,39%, hasta los 71,42 dólares, otro mínimo desde agosto. El barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, bajaba un 2,35%, hasta los 61,62 dólares. El oro también se movía a la baja: retrocedía un 0,45%, hasta los 1.225 dólares la onza.