La industria comienza a recuperarse tras el desplome histórico por el confinamiento

El organismo explica en su nota que durante el mes de junio la actividad industrial se fue recuperando en la medida en que se evolucionaba en la desescalada, hasta que se alcanzó la 'nueva normalidad' el pasado 21 de junio, cuando finalizó el estado de alarma.

El mayor dinamismo respecto a mayo se sigue observando en la industria de bienes de consumo duradero, que crece un 38% y en la de bienes de equipo, que sube casi un 31%, que además fueron las que sufrieron una mayor caída en los meses de confinamiento.

El análisis detallado del INE muestra que las ramas de actividad con las tasas mensuales mayores en junio fueron la confección de prendas de vestir, que aumentó nada menos que un 168% respecto a mayo; la fabricación de vehículos, que creció un 96%; y la de muebles, que subió un 55%. En el lado contrario se situaron la fabricación de productos farmacéuticos, que tras el empujón de los meses pico de la pandemia se reduce ahora un -2,2%; y la industria del tabaco, que crece respecto a mayo pero solo un 1,1%.

Sin embargo, respecto a los niveles de junio de 2019, la confección de prendas de vestir es un 34% inferior y la fabricación de productos farmacéuticos es un 10,7% superior.

Por sectores industriales, en junio se produjeron retrocesos interanuales del 12,7% en los bienes de equipo, del 12% en la energía, del 10,2% en los bienes intermedios y del 3,6% en los bienes de consumo, que es la categoría que menos desciende.

Por comunidades, la tasa anual de producción industrial aumenta respecto a junio del año pasado solo en la Región de Murcia (+5,8%), pero disminuye en las otras 16. Las mayores caídas se registraron en Baleares (-29%), Extremadura (-22%) y La Rioja (-20%).

Los datos de junio no tienen nada que ver, por tanto, con la situación vivida en abril, cuando la producción industrial se desplomó un 33,6%, su mayor caída desde que comenzó la serie histórica en 1976. La razón de este hundimiento fue la paralización total del sector industrial durante la primera quincena de abril, coincidiendo con la Semana Santa, con el objetivo de frenar la pandemia.

Hasta ahora, el mayor descenso interanual de este índice había sido en abril de 2009, en plena crisis financiera, cuando se desplomó un 28%. En abril la industria de la automoción fue la más afectada, con un desplome de su producción del 92% respecto a 2019. Sin embargo, a partir de entonces los expertos garantizan que ya ha pasado lo peor. Los economistas de Fedea (Fundación de Estudios de Economía Aplicada) explicaron entonces en un informe que los indicadores económicos y de empleo de principios de junio muestran «de forma muy clara» los efectos de la pandemia sobre las cuentas públicas, pero también «indicios esperanzadores» de que la economía española tocó fondo en abril y que se está iniciando un proceso de reactivación.