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La incipiente recuperación del turismo vuelve a estar en entredicho no solo por la nueva ola de contagios que asola toda Europa sino también por el retroceso del principal mercado internacional, el británico. Los hoteles advierten de que las nuevas restricciones que imponen que los ... jóvenes de Reino Unido que llegan a España deben tener la vacunación completa ya genera una ola de cancelaciones.
España ha pactado con la Unión Europea exigir a los ciudadanos del país extracomunitario esta medida a diferencia de los países bajo el paraguas de Bruselas. El problema es que Reino Unido sigue su propio proceso de vacunación que cuenta con diferencias respecto a los países de su entorno y una de ellas es que aún son pocos los menores con una pauta de vacunación completa.
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Esta condición ha sido rechazada de forma frontal por la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat),que ha mostrado «su consternación al respecto señalando la incoherencia y el efecto devastador de esta medida». La entidad asegura que ya se han producido decenas de miles de cancelaciones.
La patronal avisa de que esta medida, unida a la incertidumbre por el repunte de casos y la variante omicron, ha tenido un impacto directo en las reservas, que han caído un 60% semana a semana. Además, la Cehat apunta que uno de los principales operadores británicos ha reducido 60.000 reservas debido a la misma.
La nueva restricción llega en el peor momento posible para el sector turístico. Después de un verano que comenzó mal, la situación se pudo reconducir y se cerró con unos buenos registros gracias al impulso nacional en el mes de agosto. Conforme ha avanzado el otoño han sido los turistas internacionales, que pese a ser inferiores a los de antes de la pandemia, los que han permitido mantener abiertos muchos establecimientos. Ahora este impulso se desvanece con las restricciones al primer mercado internacional.
Jorge Marichal, presidente de Cehat, es contundente al afirmar que «nos estamos haciendo el harakiri». «No entendemos estas medidas incoherentes que perjudican gravemente a un sector que ha tenido una actitud ejemplar y de cooperación constante durante toda la pandemia. Hemos sido los primeros que hemos aceptado el control y la exigencia de los pasaportes Covid en nuestros establecimientos, hemos cerrado nuestros alojamientos, hemos sido hoteles refugio, hemos colaborado con los servicios sanitarios…».
«En definitiva, hemos hecho lo que teníamos que hacer y todo lo que estaba en nuestra mano para colaborar con la situación, por lo que no entendemos por qué no se aplica el sentido común y se establecen los mismos protocolos para todos los niños y familias que deseen viajar a nuestro país estas navidades», sentencia.
La cancelación de las reservas tiene un especial impacto en Canarias, que vive en estos momentos su temporada alta, pero también en el Mediterráneo. Baleares y otros destinos como la Comunitat Valenciana, y en especial Benidorm, van a notar la falta de familias británicas.
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