España advierte que el reparto de ayudas a la transición 'verde' de Bruselas «no es muy justo»

En su primera cumbre de ministros de la UE en Bruselas, marcada por las tensiones con Irán y que tiene lugar apenas horas después del acuerdo de alto el fuego en Libia y el embargo internacional de armas, pactados el domingo en Berlín, la tolosarra no ha dudado en subrayar las «dudas de España sobre la propuesta que ha lanzado la Comisión Europea y queremos asegurarnos de que va a ir bien y va a ser justa». Y es que otro de los temas en la agenda de los ministros es la de promover una acción diplomática de la UE para concienciar al resto del planeta de la necesidad de activar medidas concretas para combatir el cambio climático.

«Tenemos que movilizar esfuerzos en las redes exteriores de la UE para impulsar un mensaje en el mundo. Pero evidentemente también hay una versión interna, porque estamos construyendo nuestros propios mecanismos para acompañar la transición ecológica en Europa que queremos que sea verde y justa», ha explicado Gonzalez Laya. Y, en este sentido, deja entrever el malestar del nuevo ejecutivo de coalición de PSOE-Unidas Podemos, con la línea de subvenciones para apoyar esa transición.

Alemania, con 877 millones de euros, y Rumanía (757 millones), son los dos países que, junto con Polonia, van a recibir más dinero. Los tres absorberían en torno al 50% de un fondo ideado para promover el paso a una nueva 'era verde' en aquellas economías con alta dependencia de combustibles fósiles como el carbón y que permita «no dejar a nadie atrás» (según la intención planteada por la propia presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen). Esos 7.500 millones se multiplicarían hasta los 100.000 que realmente se contemplan por esta vía mediante aportaciones complementarias de los Estados a distintos proyectos, la financiación del Banco Europeo de Inversiones y el capital privado.

Pero ya ese primer reparto de Bruselas, no convence a España. No porque sea Polonia uno de los grandes beneficiados (era previsible por su gran dependencia de combustibles contaminantes y, por ser, en suma, el que más difícil tiene lograr un objetivo al que no se ha comprometido con el resto de socios, el de la neutralidad en 2050). España, responsable del 4,7% de emisiones de gases de efecto invernadero, ve que la ayuda que se le consigna es muy ajustada. Tendría a su disposición menos que la República Checa (581 millones), Bulgaria (458 millones), Francia (402 millones) e Italia (364).

«España está comprometida con la transición ecológica y apoya de una manera decidida el fondo verde de transición justa, pero estamos un poquito preocupados porque lo vemos muy verde, pero no muy justo por el momento. Tiene que ser objeto de una atención particular en estos momentos», ha remarcado González Laya.