El economista turco Dani Rodrik, Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales 2020

Así acaba de decidirlo el jurado, reunido este jueves de forma telemática, que ha concedido el Princesa de Ciencias Sociales, con el que los galardones alcanzan su ecuador, a este hombre que proviene de una familia sefardí que emigró de España a finales del siglo XV y que se ha dedicado durante años a preguntarse si hemos ido demasiado lejos con la globalización, concluyendo que sí.

En su último libro.'Hablemosclaro sobre el comercio mundial, ideas para una globalización inteligente' (Deusto, 2018), Rodrik reúne los grandes temas de su obra, que versa sobre la soberanía nacional, el poder de la industria o las distintas políticas comerciales que debe aplicar cada país según el contexto en el que se encuentre. Y su conclusión es que se puede restaurar un equilibrio más sano entre la gobernanza nacional y la global.

También revisita su aportación más destacada: el trilema de la globalización. Y es que ya en 'La paradoja de la globalización' (2011), Dani Rodrik dibujó un triángulo cuyos vértices eran la globalización económica, la soberanía nacional y la democracia. ¿El problema? Solo se pueden escoger dos, y los demócratas liberales han tratado de tener las tres al mismo tiempo, provocando el descontento de sus votantes, que pueden optar por alternativas inciertas como el Brexit, el populismo o el ultranacionalismo disgregador.

Sobre la crisis de la COVID-19, Dani Rodrik ha asegurado en un artículo reciente que «las crisis vienen en dos variantes: aquellas para las que no podíamos estar preparados, porque nadie las había anticipado, y aquellas para las que deberíamos haber estado preparados, porque en verdad eran esperables». Y, para el economista el COVID-19 «entra en la segunda categoría, no importa lo que diga el presidente norteamericano, Donald Trump, para eludir responsabilidades por la catástrofe».

Y, sobre sus efectos económicos, también es concluyente: «El Cvovid-19 tal vez no altere –y mucho menos revierta- las tendencias evidentes antes de la crisis. El neoliberalismo seguirá su muerte lenta. Los autócratas populistas se volverán aún más autoritarios. La hiperglobalización continuará a la defensiva mientras los estados-nación reclaman espacio para implementar políticas. China y Estados Unidos se mantendrán en su curso de colisión. Y la batalla dentro de los estados-nación entre oligarcas, populistas autoritarios e internacionalistas liberales se intensificará, mientras la izquierda lucha por diseñar un programa que apele a una mayoría de votantes».

El Premio de Ciencias Sociales recayó en 2019 en el sociólogo Alejandro Portes y en ediciones anteriores en Michael J. Sandel, Karen Armstrong, Mary Beard, Esther Duflo, Joseph Pérez, Saskia Sassen, Martha C. Nussbaum y Howard Gardner, entre otros.

La cuadragésima edición de los Premios ha llegado este jueves a su ecuador con el fallo del galardón de Ciencias Sociales. Hasta el momento se han concedido ya los Premios Princesa de Asturias de la Concordia, que recayó en los sanitarios españoles que combaten en primera línea la pandemia del coronovirus; el de las Artes, a los compositores italiano Ennio Morricone y estadounidense John Williams, y el de Comunicación y Humanidades, a la Feria Internacional del Libro de Guadalajara y al Hay Festival of Literature & Arts.

Cada galardón está dotado con una reproducción de una escultura de Joan Miró -símbolo representativo del galardón-, un diploma acreditativo, una insignia y la cantidad en metálico de 50.000 euros.