Desplome de vuelos a Canarias tras la caída de Thomas Cook

En concreto, en el caso del aeródromo de Gran Canaria, el desplome de llegadas y salidas de usuarios ha sido superior al 6%, hasta registrar 987.333 pasajeros en septiembre; en el de Tenerife-Sur, el retroceso ha sido del 3% (casi 830.000 pasajeros); en el de Fuerteventura, el descenso ha sido de un 9% (más de 463.000) y en el de Lanzarote-César Manrique, un 1,2% menos hasta 610.000, según los datos actualizados por Aena. Los de La Palma, El Hierro y La Gomera, con capacidad más reducida, han incrementado pasajeros en un 5,9%, un 6,3% y un 32%, respectivamente.

También se ha resentido la actividad aérea en las Islas Baleares, otro de los destinos en los que operaba Thomas Cook, con registros que han avanzado mínimamente, como en el caso de Palma de Mallorca (un 0,2% más, hasta 3,7 millones de pasajeros); y un 1,2% menos en el de Ibiza (1,1 millones).

El conjunto de la red sí que ha aumentado el paso de usuarios con un incremento medio del 3,4% en septiembre, con 27,1 millones de pasajeros. De todos ellos, 19,1 millones de personas viajaron en vuelos internacionales, un 2,1% más que en septiembre de 2018, y 7,8 millones lo hicieron en vuelos nacionales, un 6,7% más.

El Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas registró el mayor número de pasajeros en el mes de septiembre, con 5,5 millones, lo que representa un incremento del 7,1% con respecto al mismo mes de 2018. Le siguen Josep Tarradellas Barcelona-El Prat, con 5,1 millones (5,4% más); Málaga-Costa del Sol, con dos millones (+2,4%); Alicante-Elche, con 1,5 millones (+8,5%); y Valencia, con casi 800.000 (+9,1%). En los nueve primeros meses de 2019, el tráfico de pasajeros creció un 4,8% y sumó un total de 213.942.748 viajeros en los aeropuertos de la red de Aena.

Los problemas para destinos como Canarias, cuya temporada alta está a punto de empezar, no se detienen tras la quiebra de Thomas Cook. La compañía de origen irlandés ha confirmado este martes su intención de despedir a 432 trabajadores de sus bases del archipiélago y de Gerona, 327 tripulantes de cabina y 105 pilotos, según ha informado el sindicato USO.

La organización, que recuerda que ayer dio comienzo el procedimiento de regulación de empleo colectivo iniciado por Ryanair, Crewlink y Workforce, ha avanzado que en el planteamiento inicial en la base catalana se verán afectados 100 tripulantes, al igual que en la base de Tenerife Sur, por lo que serán las más perjudicadas. Así mismo, indica que en la base de Gran Canaria se producirán 69 despidos y en la de Lanzarote 58, y precisa que se despedirá a 220 tripulantes contratados directamente por Ryanair, 85 por Workforce y 22 ligados a Crewlink.

Según USO, por la documentación analizada sobre el procedimiento de regulación de empleo colectivo propuesto para las bases afectadas «todo parece indicar que las causas del ERE no están justificadas». Por ello indica que en las fechas que se han fijado para comenzar las negociaciones, los días 25 y 30 de octubre, el sindicato tratará de frenar este proceso o minimizar al máximo las pérdidas de empleo.