El comité de empresa y dirección de Benteler alcanzan un preacuerdo para el convenio colectivo

El conflicto laboral en la planta del polígono de Villalonquéjar comenzó hace ya varios meses, cuando la dirección de la empresa puso sobre la mesa la posibilidad de afrontar nuevos despidos a corto plazo para garantizar la viabilidad de la factoría. Ese plantemiento generó mucho malestar en la parte sindical, que se rechazó de plano cualquier actuación en este sentido e instó a abrir cuanto antes la negociación de cara al nuevo convenio.

Una negociación que, con esos precedentes, comenzó con las posturas totalmente alejadas. No en vano, la empresa puso sobre la mesa una oferta que contemplaba la congelación salarial durante cinco años y el descuelgue del compromiso adquirido en el anterior convenio para vincular los incrementos salariales de 2021 al IPC. Se trataba, en definitiva, de una propuesta «inaceptable» para la plataforma sindical, que ha mantenido las negociaciones abierta hasta esta misma mañana, cuando ambas partes han alcanzado un preacuerdo.

En líneas generales, dicho preacuerdo contempla dos cuestiones fundalmentales. La primera es la garantía de mantenimiento de empleo durante el periodo de vigencia del convenio, planteado a tres años (2022, 2023 y 2024). La segunda pasa por un incremento salarial del 6% en tabla dividido entre los tres años a razón de un 2% anual, con pagas no consolidables en enero de 2023, de 2024 y 2025 y el pago a finales de marzo de los atrasos correspondientes a los últimos 15 meses.

Se trata, a juicio de Mariano Ortega, presidente del comité, de un acuerdo «razonable», habida cuenta de que la planta burgalesa no atraviesa «el mejor escenario posible» debido al contexto económico en el que se desenvuelve.

Eso sí, en todo caso, el preacuerdo debe ser ratificado por la propia plantilla este próximo jueves. Antes, el miércoles, se celebrará una asamblea informativa entre los trabajadores. En caso de que el preacuerdo no sea ratificado, se abrirá un segundo escenario, en el que empresa se compromete a aplicar de manera directa el incremento del IPC pactado para 2021 y el 6% consolidado en tabla a tres años, pero sin garantía de mantenimiento de empleo.