Calviño admite retraso en la llegada de los fondos europeos

En concreto, la ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha explicado que confía en que el primer desembolso a los países se produzca «antes de septiembre». La estimación hace solo unas semanas era que estos pagos llegasen «a partir de junio».

Desde el Ministerio explican que esta cierta demora se debe a la tardanza de algunos países en aprobar sus permisos ante la Comisión. La propia ministra ha concretado en Antena 3 que «Rumanía y Polonia han tardado más de lo que hubiera sido deseable y el tema va avanzando un poco más lento de lo previsto, pero va avanzando».

Fuentes de Economía hacen hincapié en que este retraso no implica ningún tipo de obstáculo para las previsiones de crecimiento, deuda y déficit establecidos en el Plan de Estabilidad remitido a Bruselas, que cuentan con los fondos para su cálculo. De hecho, recuerdan que el Gobierno español ya adelantó en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) 27.000 millones de euros del dinero que llegará de Europa para este año. La pregunta es si el retraso actual permitirá cubrir ese dinero anticipado en 2021.

Tal y como detalló el Ejecutivo hace unas semanas, España esperaba recibir unos 9.000 millones de euros para la prefinanciación del Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia tan pronto como Bruselas aprobase el documento, remitido (también apurando plazos) el pasado 30 de abril, y una vez se aprobase el documento por parte de la Comisión, a partir de este mismo mes de junio.

Además de esos fondos, el país recibiría su primer pago semestral este año para sumar 16.000 millones, a los que se sumarían los 2.000 millones en ayudas para la cohesión previstos con el denominado fondo REACT-EU. En total, los 27.000 millones adelantados por el Gobierno para poner en marcha los proyectos lo antes posible.

El despliegue del Plan de Recuperación es el pilar fundamental para que, además de las reformas, el Gobierno ejecute todo el gasto y las inversiones previstas de aquí a 2023. Ya se han transferido a las comunidades autónomas los recursos para aquellas que sean de su competencia y la ministra de Economía ha pedido celeridad a las autonomías para que las ayudas lleguen cuanto antes a sus destinatarios.

En total, España percibirá 140.000 millones de euros de los fondos europeos. De esa cifra total, de momento sólo ha pedido los 69.500 millones, los que corresponden a las transferencias y no a los créditos que se pueden pedir hasta 2026. Así, será uno de los países que más ayuda perciba de este histórico plan de la Unión Europea, dotado en ntotal con 750.000 millones de euros a repartir entre los Veintisiete.

De hecho, la Comisión aprobó hace solo unos días la orden de recursos propios, la legislación necesaria para poder acudir a los mercados a emitir deuda para financiar los fondos. Pese a todo, y como está quedando patente con los últimos acontecimientos, los movimientos en Europa siguen siendo algo más lentos de lo esperado.

Además de las inversiones, España tendrá que responder a la llegada de este dinero con reformas que aseguren una estabilidad económica a largo plazo, incluidas en el Plan de Recuperación. Precisamente, la Comisión Europea emitió un informe este miércoles en el que insta a los países con una elevada deuda (la española supera el 120% del PIB), que mantengan una política fiscal «prudente». Y acordó mantener suspendidas las reglas fiscales también en 2022, algo que España y otros países llevan solicitando desde hace meses.

La idea es dar cierto respiro a los países para acometer el proceso de recuperación sin límites imposibles ahora mismo al gasto, para que en 2023 se vuelva a una mayor contención de la política fiscal. En este sentido, Calviño ha indicado que «es verdad que España es uno de los países que tiene un nivel de deuda más elevado, pero también que nuestro Gobierno está comprometido con empezar a reducir el déficit público y la deuda ya en este año aprovechando el crecimiento económico intenso que todos esperamos en la segunda parte del año».