Liberbank y Unicaja, a un paso de cerrar su fusión

Ese último escollo partió de la posición del Banco Central Europeo, que no permite que convivan un presidente ejecutivo y un consejero delegado. Únicamente permitirá que el presidente del banco fusionado tenga funciones ejecutivas durante un periodo de dos años, pasando el mandato ejecutivo al consejero delegado una vez transcurrido ese plazo. Lo inicialmente planeado era que el presidente de Unicaja, Manuel Azuaga, ocupara la presidencia ejecutiva de la nueva entidad, y que el consejero delegado fuera Manuel Menéndez, actual presidente de Liberbank. Por ello, los andaluces habían reclamado que este último dejara el cargo dentro de dos años, para recuperar el mando ejecutivo en la nueva entidad en el año 2023. La solución intermedia que habrían encontrado las dos entidades pasaría por retrasar a dentro de dos años la elección del consejero delegado, proceso del que no se excluiría a Menéndez. Azuaga no podrá participar porque en 2023 cumple 75 años y habrá de retirarse.

En definitiva, en el año 2023, se reevaluarán las funciones del consejero delegado y del presidente y el consejo de administración nombrará al consejero delegado, sin que haya dentro del acuerdo que está a punto de firmarse una asignación previa de puestos.

Unicaja celebra entre este lunes y este martes su consejo de administración para aprobar definitivamente la operación. Y este martes, también Liberbank convocará el suyo. El objetivo, que el acuerdo para la integración se cierre antes de que termine el año. De lo contrario, de adentrarse en 2021 sin haber cerrado los detalles de la fusión, se tendrían que recalcular sus términos económicos con los resultados de este 2020.

Y es que parece que también hay acuerdo en el capítulo económico, con una ecuación de canje que da a Unicaja un 59,5% de la futura entidad y un 40,5% a Liberbank, cifras muy próximas al 40%/60% que se había marcado como objetivo la entidad andaluza.

Entre ambas entidades sumarían una plantilla conjunta cercana a los 10.000 empleados y una red de más de 1.600 sucursales. La cuota de mercado que reunirán las dos entidades juntas varía por comunidades autónomas. Por ejemplo, en Asturias, su negocio conjunto supondría alrededor de un 27% del total; en Castilla y León, un 20%; y en Cantabria, un 30%. En Castilla-La Mancha superaría el 30%, mientras que en Extremadura alcanzaría el 38%. En cambio, en Andalucía apenas se llegaría al 19% de cuota de mercado.

Unicaja está asentado fundamentalmente en Andalucía y Castilla y León, mientras que Liberbank es la suma de Cajastur-Banco CCM, Caja Cantabria y Caja Extremadura.