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Un día después de anunciar la posibilidad de reducir el impacto del ERE que negocia con los sindicatos, CaixaBank ha puesto cifras al número de trabajadores que se verán afectados por el ajuste laboral que prevé el banco. En concreto serán 7.400 las ... salidas voluntarias que se prevén, de los más de 50.000 trabajadores con los que cuenta la entidad en España. Son 205 menos que los de la anterior propuesta, que se encontraba por encima de los 7.600.
Cuando comenzó la negociación del ERE, CaixaBank había planteado la salida de 8.300 trabajadores en lo que iba a ser el mayor expediente colectivo puesto en marcha por un banco en España. Con el paso de las semanas esa cifra ha ido descendiendo lentamente hasta los 7.400 actuales, un 14,5% del total.
En la reunión mantenida esta mañana, la dirección del banco se ha reafirmado en el compromiso de que las 686 recolocaciones previstas en empresas filiales se harán manteniendo el salario fijo y la antigüedad y, además, contarán con posibilidad de reincorporación en determinadas situaciones y transcurrido un período de tiempo. También se han negociado nuevas propuestas en materia de flexibilidad de la red comercial y condiciones laborales.
En cuanto a las compensaciones por la extinción de contratos, la dirección solicitado a los sindicatos «una nueva propuesta que sea asumible» por la entidad. Esta parece convertirse en otra cuestión peliaguda, ya los representantes de los trabajadores habían propuesto la semana pasada prejubilaciones desde los 49 años, una medida que tendría un coste de 4.000 millones para CaixaBank que la empresa ve excesivo.
La negociación tomaba este lunes un nuevo rumbo ante los visos de que no será fácil alcanzar un acuerdo con los sindicatos antes de este jueves, día 10 de junio, cuando culminaba el periodo de negociación formal. La dirección admitió reducir el número de despidos de la red comercial a cambio de que esos puestos sirvan para cubrir bajas de larga duración, paternidad o maternidad o vacaciones, entre otras contingencias. Hasta ahora, la entidad cubría esas necesidades temporales con contrataciones eventuales externas. Ahora, manteniendo un excedente de plantilla en algunas oficinas, como se ha propuesto, los equipos tendrían margen para organizarse y cubrir entre ellos dichas bajas o vacaciones, como propusieron los sindicatos.
Este avance en la negociación fue comunicado después del paro de una hora que secundó el 87% de la plantilla de CaixaBank, según cálculos de los sindicatos, este mismo lunes. Además, la corporación comunicaba también que amplía el periodo de la negociación hasta finales de mes. En concreto, hasta el día 29. Lo hizo ante una amenaza de huelga el día 9 de junio, que se encuentra sobre la mesa.
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