El BBVA se escuda en su auditoría sobre Villarejo para eximirse de culpa

En nombre del BBVA, investigado como persona jurídica en esta pieza de la 'operación Tándem', Fraguas se ha escudado en la auditoría interna que ha llevado a cabo la entidad cuando estalló el caso en los medios de comunicación, en mayo de 2018.

En concreto, tras conocerse las presuntas facturas de servicios prestados por Cenyt, la mercantil de Villarejo y de su socio Rafael Redondo, al banco por 242.000 euros (un año y medio después los investigadores han elevado los contratos a diez millones de euros en 13 años, de 2004 a 2017).

El abogado ha aportado documentación desde los primeros años de los contratos y ha trasladado de manera «proactiva» la información obtenida en la investigación interna 'forensic', realizada por la consutora Price Waterhouse Coopers (PwC )y los despachos Garrigues -la firma de cabecera del BBVA- y Uría Menéndez, según ha comunicado la entidad en una nota y han confirmado fuentes jurídicas.

De esta puesta en escena de Fraguas para defender la actuación del banco, ha concluido que de los hechos investigados «no se deriva responsabilidad para el BBVA», según la nota de la entidad presidida por Carlos Torres. En línea con otras declaraciones al respecto, el mandatario ha destacado que su prioridad «es el esclarecimiento de los hechos colaborando con la Justicia, como hemos hecho hasta ahora. Somos un banco con fuertes valores y principios que guían nuestro comportamiento cada día«.

El BBVA está siendo investigado en la causa por el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón por delitos de cohecho, revelación de secretos y corrupción en los negocios.