«Ayudaremos a los Estados a implantar sus planes de recuperación»

–Entre todas esas cuantías, ¿en qué posición está España?

–España ha estado siempre entre los países más beneficiados por la financiación del BEI y este año ha vuelto a ser así. En 2020 ha sido el segundo país en número de firmas con 98 operaciones y el tercer país en volumen de financiación firmada, con 8.454 millones. Hemos contribuido al PIB español en un 0,8%. Además, un 58% de la financiación se dedicó a mitigar los efectos económicos causados por el coronavirus. A lo largo de 2020 hemos firmado 46 operaciones por valor de 4.900 millones y hemos aprobado una financiación de 12.100 millones para hacer frente a la crisis provocada por la pandemia. Eso sitúa a España como el país con el mayor volumen de aprobaciones de proyectos relacionados con el coronavirus.

–¿Cuáles han sido los proyectos más financiados?

–Sin dejar a un lado nuestra recién aprobada Hoja de Ruta del Clima, la pandemia ha requerido que centremos los esfuerzos europeos en frenar la propagación, encontrar tratamientos y desarrollar vacunas, así como apoyar a las empresas más perjudicadas. Las medidas del BEI se han concentrado en apoyo al sector sanitario y las pymes.

–¿En qué trabaja ahora el BEI de cara a 2021?

–En primer lugar, continuar con las medidas adoptadas para frenar la expansión de la pandemia, y por supuesto la prioridad para España, como para el resto del Grupo BEI, es reforzar nuestra financiación climática apoyando proyectos de energías renovables e inversiones que promuevan la eficiencia energética, el transporte limpio y las infraestructuras necesarias para la descarbonización de la economía, como la infraestructura ferroviaria, metro, etc. Además, seguiremos centrando nuestros esfuerzos en el apoyo a pymes y 'midcaps' así como en el fomento de la innovación y la digitalización de las empresas.

–¿Y los proyectos de vacunación o para evitar propagación?

–La actual cartera de proyectos del BEI para apoyar tanto la infraestructura sanitaria crítica como las inversiones en I+D en el sector sanitario en la UE asciende a unos 6.000 millones. Con el próximo Marco Financiero Plurianual por 1.074 millones y un fondo de recuperación de 750.000 millones, el Next Generation EU, estamos preparados para la recuperación y para la renovación de la economía europea. Somos un socio natural para los Estados miembros tanto en la finalización de los Planes de Recuperación y Resiliencia como en el apoyo a su implementación. Estamos en contacto con varios Estados miembros, entre ellos España, para apoyar a las administraciones a la hora de combinar los planes nacionales de recuperación con los productos financieros y la capacidad de asesoramiento del BEI. Como Banco de la UE, seremos el principal socio implementador de Invest EU, el programa de inversión europeo que continuará apoyando a las empresas a invertir para llenar el vacío de inversión. Además, el BEI contribuirá a la ejecución de otros programas de la UE como Europa Digital, el Espacio Europeo, el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, los fondos estructurales y el Mecanismo para una Transición Justa.

–En España las empresas piden más ayudas públicas.

–Se ha realizado una cantidad extraordinaria de inversiones tanto por la UE como por cada uno de los Estados. El año pasado, el BEI destinó un 50% de la actividad total en España a tratar de solventar las necesidades de liquidez de las pymes, que recibieron casi 4.200 millones destinados a garantizar que disponen de los fondos necesarios para mantener a flote sus negocios.

–¿Y en qué otros objetivos se centra el BEI dentro de la agenda europea?

–La principal misión es apoyar la economía europea, crear puestos de trabajo, promover un crecimiento inclusivo y sostenible y fomentar la igualdad para seguir mejorando la vida de nuestros ciudadanos. Algunos de los desafíos actuales son tanto el fomento de una transición verde y la aplicación del Pacto Verde como impulsar la innovación, la transición digital y apoyar el poder creativo de las pymes.