Nadal se ahoga ante Goffin y España necesitará el dobles

El cambio de pista mermó las opciones del balear. Bautista lo había advertido en su encuentro anterior: «Es más lenta» y a Nadal le costó acostumbrarse. Comenzó muy por detrás, mostrando malos signos y concediendo oportunidades de rotura a Goffin, hasta que el belga se puso por delante. Un mal menor que el balear corrigió hasta disponer de 4-3 a favor y 0-40 sobre el saque de Goffin. Punto de inflexión tras el que se desinfló. No fue capaz de quebrar el servicio y entregó tres juegos consecutivos para despedirse del primer set.

Nadal sofocaba y el belga estaba muy cómodo en una pista en la que había jugado ya durante toda la fase de grupos. Con la inercia de lo vivido en el primer parcial, Goffin se apuntó también los dos primeros juegos del segundo set, encendiendo las alarmas del equipo español.

El calor y la humedad de Sídney y la falta de aclimatación de Nadal mataban sus opciones, a medida que se deshidrataba y Goffin seguía conectando golpes que hacía meses y meses que no hacía.

En el toma y maca, Nadal consiguió reducir las distancias y competir, pero siempre por detrás. Logró recuperar la rotura y acercarse a forzar el tercer parcial. Goffin, que no suele ser un ejemplo de contundencia, no se dejó llevar y dirigió el partido hacia un 'tie break' que terminó de condenar a Nadal.

Es la primera derrota del manacorense desde que cayó contra Alexander Zverev en las Finales ATP, por lo que se rompe una racha de 16 partidos consecutivos ganados.