Secciones
Servicios
Destacamos
Jesús Gutiérrez
Sábado, 19 de octubre 2024, 16:50
Ducati marca el paso en el motociclismo actual y su prototipo es tan superior, que los cuatro pilotos que todavía mantienen opciones matemáticas de conquistar el título de la clase reina llevan una de las dos versiones de las todopoderosas Desmosedici GP. La más deseada, la GP24 de este año, se sirve a los dos pilotos del equipo oficial, Pecco Bagnaia y Enea Bastianini, además de Jorge Martín, que corre con material 'pata negra' en el equipo satélite del Pramac Racing. Por su parte, Marc Márquez tiene la versión del año pasado, la GP23, muy competitiva pero un paso por detrás en la evolución mecánica.
Noticia relacionada
Jesús Gutiérrez
Aunque las matemáticas dicen que el Mundial es cosa de cuatro, en la práctica, el duelo es a dos, entre Martín y Bagnaia. Ambos están reeditando el mano a mano que ya protagonizaron en 2023, más apretado si cabe, y eso que entonces le título no se decidió hasta el último domingo en Valencia. Pero si entonces, el italiano llegó a disponer de una amplia renta que fue recortando el español en el último tercio de campeonato; esta temporada la igualdad ha sido la tónica desde el primer día y, aunque Martín casi siempre ha estado por delante, el margen ha sido muy estrecho.
Lo normal sería que la corona de MotoGP se decidiera un año más en Valencia. De hecho, sería lo deseable para el organizador y para las televisiones, que son las que pagan parte de la fiesta. Un desenlace en la última prueba en prime time, en lugar de los horarios intempestivos para el público europeo que sigue entre cafés la actual gira Asia-Pacífico. Aunque hay quien piensa que el título está sentenciado desde hace semanas en favor de Bagnaia, por el hecho de que Jorge Martín cambiará de colores el año que viene.
La mano negra que algunos quieren ver en Ducati nunca ha sido tal. Ya el año pasado estuvo en el ambiente ese supuesto favoritismo de Bagnaia sobre Martín porque era italiano y corría para el equipo oficial. Entonces el argumento era que la marca no permitiría que una escudería privada ganara a la fábrica. Y la realidad demostró que hasta el último domingo del curso el español mantuvo sus opciones intactas.
Este año, la abrupta salida de Martín con dirección a Aprilia para las dos próximas temporadas echaba más gasolina al fuego. La cúpula boloñesa eligió a Márquez para que vistiera de rojo oficial, dejando en la estacada al de San Sebastián de los Reyes, que se buscó la vida fuera del entorno de Ducati. ¿Cómo iban a permitir que se llevara el dorsal número 1 a otra fábrica?
«Los que dicen que no dejaremos ganar a Jorge Martín no conocen mi historial», se reivindicaba Gigi Dall'Igna, máximo responsable del proyecto de MotoGP de Ducati y padre de la actual saga DesmosediciGP, en una entrevista con el diario italiano La Gazzetta dello Sport, donde aseguraba que la marca no se iba a inmiscuir en el duelo que sus pilotos tendrían en la pista. «Esto es un deporte y lo correcto es que el mejor piloto tiene que ganar. Creo que es significativo que no hayamos introducido más innovaciones técnicas, evitando que ningún piloto reciba un trato preferencial sobre el otro».
Una vez más los hechos dan la razón a Ducati. Y es que, en el pasado test de Misano celebrado en septiembre, Bagnaia probó el primer prototipo del chasis 2025 y le encantó (lógicamente, como Martín no estará en Ducati no prueba novedades el próximo curso). El piloto italiano pidió correr con esa pieza el tramo final de temporada y la respuesta de la fábrica fue tajante. O a todos, o a ninguno. Y el chasis se empaquetó camino de vuelta a Bolonia.
«Si quisieran ayudarme a mí, desde Misano podría haber tenido algo mejor que nuestro paquete actual, pero como no estaba preparado para los cuatro pilotos de la GP24, no lo estamos utilizando. Es lo más correcto y lo que Gigi siempre ha dejado claro. Aportar el mismo material a todos los equipos es la estrategia que ha colocado a Ducati en la posición en la que está y no va a cambiar nada hasta Valencia». Pecco Bagnaia contestaba el pasado jueves en rueda de prensa a la pregunta de si Ducati iba a influir en el resultado final.
La pregunta esta vez no la hacía un periodista, sino el novato Pedro Acosta, que ponía algo de picante al duelo por la corona de MotoGP. Al lado del políticamente correcto Bagnaia, Martín dejaba la puerta abierta a las especulaciones: «Entiendo que, si formulan esta pregunta, es porque lo piensan así. Por mi parte eso es algo que no puedo controlar, así que no me voy a centrar en eso si no en lo que yo puedo controlar, que es pilotar al cien por cien y espero que no vaya a ser el caso». Un debate que, para lo bueno o para lo malo, estará en el ambiente hasta que se resuelva el título de MotoGP en Valencia… o antes.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La bodega del siglo XIV que elabora vino de 20 años y el primer vermut de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.