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David Sánchez de Castro
Sábado, 27 de julio 2024, 18:15
Al salir a una clasificación con diez posiciones de sanción, consciente de que no va a lograr la pole, lo único que puede hacer un piloto es intentar acabar lo más alto posible para luego remontar. Así, Max Verstappen se tomó más en serio que nunca una clasificación del Gran Premio de Bélgica que, además, se disputó bajo la lluvia. Algo que por otro lado en Spa era algo previsible.
El que saldrá primero será Charles Leclerc. El monegasco encontró una vuelta inesperada en la Q3, justo cuando parecía que podía ser Sergio Pérez el que se reivindicase con una pole que hace no tanto no esperaba. El mexicano mejoró notablemente las expectativas puestas, que estaban muy bajas, y tiene una oportunidad de oro de salvar la guillotina que pende sobre él.
En cuanto a los españoles, Fernando Alonso volvió a meterse entre los diez primeros, que ya deja de ser noticia por suerte para él, y partirá octavo. Justo delante, Carlos Sainz tratará de reivindicarse y, con algo de suerte, acercarse al podio.
La lucha por no caer en la zona más húmeda de un circuito de Spa en condiciones muy complejas fue la mayor de las batallas en el inicio de la sesión. Y es que la situación fue radicalmente distinta conforma pasaban los minutos. La presencia de un carril seco hizo que todos los pilotos tuvieran claro que tenían que pasar el corte en la recta final de la Q1, algo que no fue fácil.
El accidente que tuvo por la mañana Lance Stroll, por ejemplo, puso en riesgo su presencia en la siguiente ronda, pero conforme el agua empezó a caer con más fuerza, se dio cuenta de que su objetivo era netamente sobrevivir. Aun así, con un Max Verstappen primero pese a la sanción de diez posiciones para el domingo aún tenía mucho que decir, no hubo grandes sorpresas. Los que cayeron bien se firmarían en una carrera al uso y sin agua: Hulkenberg, Magnussen, Tsunoda, Sargeant y Zhou. Tanto Alonso como Sainz pasaron a la Q2 con relativa facilidad.
La duda no estuvo en ningún momento en ver qué pilotos pasaban el corte, más allá de los cinco habituales, sino en ver a los que suelen liarla, como Sergio Pérez. El mexicano sufrió lo suyo para pasar el corte, hasta el punto de que pilotos que a una vuelta deberían ser más lentos, como Fernando Alonso, le sacaron los colores superándole.
Sin embargo, y por primera vez en varias carreras, Checo logró pasar a la Q3, aunque por la mínima: solo tres milésimas le separaron de la zona de eliminación, que abría Alex Albon, muy motivado. El mexicano no falló en aprovechar este corte por la mínima. El que no aflojó fue Max Verstappen, más por meter miedo que por utilidad, ya que ni en la Q2 le valía de nada, y ni haberlo logrado en la Q3 hubiera supuesto una pole. Pero marcar territorio, a veces, es también útil.
Las constantes dudas sobre la lluvia marcaron también esta tanda. Muchos pilotos incluso se plantearon poner neumáticos de seco, aunque desistieron enseguida. Los hombres que se quedaron fuera fueron Albon, Gasly, Ricciardo, Bottas y Stroll.
La lluvia empezó a arreciar mediada la Q3, lo que hizo que el primer intento fuera casi definitivo para todos. Así, ni Carlos Sainz ni Fernando Alonso pudieron mejorar el octavo y el noveno tiempo que lograron respectivamente, aunque conscientes de que iban a ganar una posición por la sanción que arrastraba Verstappen.
Y eso que el neerlandés fue el más rápido. El cambio de motor se notó en las prestaciones del Red Bull del campeón del mundo, lo que le permitió minimizar el daño de dicha sanción. Fue el más rápido con solvencia, por más de medio segundo sobre el hombre que, realmente, abrirá la parrilla este domingo.
No será Sergio Pérez, que hasta los instantes finales estuvo en posición de acabar segundo (a más de seis décimas del tiempo de Verstappen, pero segundo al fin y al cabo). El mexicano creía que iba a lograrlo, lo que hubiera sido suficiente para heredar una pole con la que apenas soñaba. Cuando ya se hablaba de 'Pole' Pérez, llegó Charles Leclerc. El monegasco sacó una vuelta de donde nadie se lo esperaba y mejoró en una décima el crono del mexicano, con lo que será él quien salga primero este domingo. Vistos los precedentes, es bastante probable que no logre la victoria, pero que le quiten lo bailado.
Pero no será ese el principal punto de interés, sino sobre todo ver hasta dónde llega Verstappen o si Pérez, de una vez, se gana la continuidad en Red Bull. Porque casi todos tienen claro que la victoria de Leclerc es bastante improbable.
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