Carlos Sainz ya sabe lo que es probar un Ferrari ganador

El piloto salió a primera hora ya con el mono que lucirá esta temporada y con el que será su nuevo casco, cuyo diseño difiere bastante del visto en el bienio de McLaren. Habituarse al nuevo asiento, al comportamiento del monoplaza y dar datos que pueden servir para el desarrollo del SF21 con el que ya competirá de manera seria fueron los primeros objetivos de un día más simbólico que útil. No fue más que una jornada para desentumecer los músculos, habituarse a los nuevos automatismos (como comunicarse con su ingeniero de pista, Riccardo Adami) y comparar datos con Charles Leclerc, que rodó el día anterior.

Aunque habrá notables cambios con respecto al coche que lleve a la pretemporada de Baréin, evidentemente, la sensación con la que Sainz se bajó del monoplaza de hace casi tres años es más que positiva. Aquel fue un coche ganador, lo que dista mucho del hierro que llevaron Vettel y Leclerc en 2020. La amenaza de que el bólido rojo que lleven este año sea más parecido a este que a aquel sigue rondando la mente de un Sainz que, pese a todo, confía en el buen hacer de los técnicos de la Scuderia.

Las sensaciones fueron más que positivas para Sainz y para los propios responsables de Ferrari. El mismísimo John Elkann, presidente del grupo FIAT (y de Stellantis, la empresa nacida de la fusión con PSA, el grupo de Peugeot) y heredero del legendario Gianni Agnelli (su abuelo), se acercó a Fiorano (que está a escasos tres kilómetros de la sede central de Maranello) para verle en directo y mostrarle su apoyo en sus primeros días como piloto de la 'familia'. Y es que Sainz, entre otras cosas a las que se tendrá que habituar, pilotará a partir de ahora para un equipo que es más que una escudería: es una familia, con todo lo bueno y lo malo que ello conlleva.

Aunque Ferrari no dio los datos, los técnicos sí estudiaron las diferencias entre Leclerc y Sainz. Ambos ya han rodado con este monoplaza de 20218, con la ventaja evidente para el monegasco de que él no solo ya lo había hecho en unos test el año pasado, sino que además es un veterano en el equipo. La pareja más joven de la Scuderia desde hace más de 40 años afronta con ganas la próxima campaña, en la que uno de los grandes objetivos será ver quién es quién a la hora de coger el cetro (y la responsabilidad) de ser el piloto número 1.

El 'feedback' que dio el madrileño a sus responsables fue más que positivo, pero la hora de la verdad llegará en la pretemporada. Aún no se conoce la fecha concreta de presentación del nuevo SF21, un nombre mucho más escueto que su predecesor, un SF1000 que todos quieren olvidar cuanto antes. Lo admitía el propio Charles Leclerc, que fue el encargado de rodar el día anterior: la ilusión con la que afrontan la próxima temporada viene dada no solo por verse arriba, sino también por dejar atrás su mal sabor de boca del pésimo 2020.

Este viernes Ferrari cerrará la semana de test con una sesión para Mick Schumacher, que necesita entender perfectamente los conceptos de la Fórmula 1 antes de ponerse al volante del Haas con el que va a competir en el 'gran circo' en este 2021. El hijo del heptacampeón, miembro de la Ferrari Drivers Academy, tendrá muchas miradas puestas en él durante esta temporada, incluida la de un Carlos Sainz que es consciente de que puede ser una amenaza a medio plazo por un puesto en el primer equipo.