El Recoletas, lanzado hacia la semifinal de la liga

El partido, de hecho, tuvo poca historia. Si acaso, cierta igualdad durante los primeros minutos, en los que Les Abelles demostró por qué se ha metido en la fase final a base de fuerza en el empuje y seriedad en la línea defensiva. Sin embargo, poco duró la resistencia. Apenas se habían disputado cinco minutos de juego cuando Walker posaba el primer oval tras varias melés consecutivas en zona de 22. Carrió anotaba la transformación y el cuadro burgalés ponía las primeras ventajas en el marcador.

Acto seguido respondían los levantinos, ejecutando a la perfección un maul tras touch en zona peligrosa y anotando el que a la postre sería su único ensayo. Bautista la metía entre palos y ponía el empate en el marcador. Un empate, eso sí, efímero.

Y es que, a partir de ahí, sólo hubo un equipo sobre el sintético de San Amaro. En el 15, Carrió mandaba a palos una magnífica patada, y cuatro minutos después, Rascón culminaba una magnífica fase ofensiva colectiva y volvía a posar el oval. Carrió anotaba la transformación y el Recoletas abría brecha (17-7).

Una brecha que seguiría creciendo a lo largo de la primera mitad con otros dos ensayos de Facu López y Tani Bay, que conseguían culminar sendos jugadones ofensivos del cuadro local. Una nueva transformación de Carrió ponía la máxima diferencia en el marcador (29-7) cuando el encuentro enfilaba ya el descanso.

El Recoletas Caja Rural se estaba mostrando muy superior a su rival en todas las fases del juego, anulando la capacidad ofensiva rival, siendo muy fuerte en el empuje y el choque y rompiendo líneas con cierta facilidad.

El escenario, pues, parecía propicio para que el cuadro burgalés cerrara el partido en los primeros compases del segundo acto. Y lo acabó consiguiendo, a pesar de la mejoría defensiva mostrada por Les Abelles tras el paso por vestuarios. Una mejoría que, sin embargo, acabó siendo insuficiente como para frenar el envite del cuadro local, que ya con las segundas unidades sobre el sintético volvió a aplicar el rodillo. Dos ensayos consecutivos de Boronat y Rascón mediado el segundo tiempo terminaron por sentenciar el partido (39-7) ante un rival que, eso sí, no tiró la toalla en ningún momento.

Así, el conjunto levantino siguió peleando cada oval y cada placaje, pero nunca fue suficiente para frenar la inercia gualdinegra. Lejos de ello, los burgaleses continuaron aprovechando cada ocasión para demostrar por qué son ahora mismo el rival a batir. En el 71, Zumeta culminaba otra gran fase ofensiva con un posado inapelable, Sirvent transformaba y ponía a su equipo 39 arriba (46-7).

Y ya sobre la bocina, ambos protagonistas ponían el broche de oro (53-7) para un partido que pone en evidencia las credenciales del Recoletas Caja Rural, que ya espera a El Salvador para la semifinal.