Craviotto y Toro, directos a la final de K2 200

«Visto desde fuera arrancaron muy bien. La primera parte fue muy buena, pero estuvieron un poco rácanos en la segunda. Es cierto que tienen muy claro que el K4 es la baza importante y de que estos son pasos previos y no quieren gastar demasiada energía, pero formaba parte del protocolo hacer esta serie un poco más fuerte», señaló García en declaraciones difundidas por la Federacióm Española de Piragüismo.

No obstante, el preparador español destacó el buen hacer de Craviotto y Toro, que cumplieron con el objetivo con el objetivo de entrar primeros.

Y eso que como destacó Saúl Craviotto todavía quedan «cuestiones que mejorar». Una mejora que el palista español se mostró convencido de que llegarán en la final.

«El debut sobre el papel ha estado muy bien. Hemos ganado la serie, que era el objetivo. Hay cosas que mejorar, pero es la primera competición y siempre estás más nervioso. Hay cuestiones a mejorar, pero estamos convencidos de que así será para la final», indicó Craviotto.

Una idea con la que coincidió su compañero Cristian Toro, que destacó las «buenas sensaciones» que tuvieron durante la disputa de la serie clasificatoria.

«Hemos tenido buenas sensaciones durante el calentamiento y también durante la serie, pero como dice mi compañero todavía tenemos cosas que mejorar. Somos exigentes y venimos a pelear y a dar lo mejor de nosotros», indicó Toro.

Igualmente logró el billete directo para la final la embarcación española de C4 500, integrada por Noel Domínguez, Pablo Graña, David Barreiro y Mouhssine Moutahir, tras concluir terceros en su serie.

Por la mañana, las ocho embarcaciones con las que la selección española abrió su participación lograron su clasificación para sus respectivas semifinales. El ganador de la I Copa del Mundo 2018 en K1 500 y cuarto en K1 1.000, el gallego Roi Rodríguez, ganó con autoridad su serie y encarriló su pase hacia la semifinal en la distancia del kilómetro. El palista de Tomiño (Pontevedra) regresa a la pista lusa de Montemor, en Portugal, donde se proclamó campeón del mundo sub-23 en 2015.

En K2 1.000 metros, el castellano-manchego Paco Cubelos y el vasco Iñigo Peña fueron segundos en la eliminatoria tras los serbios, vigentes campeones del mundo, con los que fueron igualados durante la mayoría de la regata hasta cedieron un poco al paso por los 750 metros, sin desgastarse ya en los últimos metros puesto que solo el primero obtenía el pase a final directa.

El C2 1000 de los gallegos Sergio Vallejo y Adrián Sieiro, bronce en el Europeo 2018, también fueron segundos después que haber liderado la carrera en la primera mitad hasta que el C2 ruso les rebasó mediado el recorrido.

El asturiano David Fernández Marqués quedó tercero en C1 500 metros en una regata en la que se ha mantenido en el grupo de cabeza en todo momento.

En K1 500 el madrileño Enrique Adan debutó en un Mundial sénior consiguiendo la quinta plaza en la serie en la que ha ido de menos a más, con una progresión manifiesta en el último 200.

En sexto lugar entraron en meta otras dos embarcaciones españolas, la castellano-leonesa Patricia Coco en C1 500 y la joven gallega Carla Frieiro en K1 500, ésta debutante en un Campeonato del Mundo sénior.

En K2 500 la gallega Natalia García y la catalana Laia Pelachs aprovecharon la última plaza clasificatoria para pasar a semifinales al quedar séptimas.