Amiran Liparteliani es campeón de España de Artes Marciales Mixtas (MMA). Con este triunfo en el campeonato nacional a finales del mes de junio ganó su pasaporte para acudir al Campeonato del Mundo de esta disciplina. Amiran, burgalés de origen georgiano, no lo dudó y se puso como objetivo hacerse con el título mundial; sin embargo, no contaba con que los gastos para poder competir correrían por su cuenta.
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«El siguiente paso tras proclamarme campeón de España es ir al Mundial», cuenta Amiran. «Toca lejos, en Uzbekistán, y el siguiente paso es ir allí, competirlo y traerme el oro», sueña. Pero para conseguir el oro cuenta con numerosos escollos que debe superar. El primero de ellos, los rivales: «Somos 16 participantes y va a ser bastante más complicado. Hay que pasar por cuatro peleas que se harán en dos días».
Pero no es esta la mayor dificultad a la hora de poder proclamarse campeón del Mundo el 4 de noviembre, sino el desembolso que tendrá que hacer para poder competir. La sorpresa llegó cuando se enteró de que la Federación no corre con los gastos de participación. Así que Amiran decidió que este tren tenía que cogerlo. «Tengo 34 años, puede ser la última vez que pueda participar», reconoce.
Amiran está ya preparando el Mundial, aunque reconoce que entrena cuando puede. «Tengo mi trabajo, la familia y con mis circunstancias no puedo dedicarle el 100%. Entreno todas las tardes, cuando salgo de trabajar, y entreno más que los demás para poder estar más preparado», asegura.
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«He hecho un esfuerzo económico por poder inscribirme, comprar los billetes y los hoteles y ahora busco ayuda para encontrar un patrocinador para poder competir», indica Amiran. Además de buscar alguna empresa que quiera patrocinarle también ha abierto una cuenta de micromecenazgo para recaudar los 3.000 euros que lleva invertidos. «Mis amigos están colaborando con todo lo que pueden y con el 'crowdfunding' espero que haya gente que se anime a ayudarme», solicita.
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Amiran lleva compitiendo desde 2018, después de dejar el que había sido su deporte, el baloncesto. De niño hizo kárate, después probó con el judo y una vez que abandonó las pistas de baloncesto volvió a las artes marciales. «Elegí artes marciales mixtas porque junta la lucha con el golpeo y creo que es lo que mejor me viene para mis características», afirma.
Las artes marciales mixtas (MMA) es un deporte que mezcla técnicas de diferentes artes marciales: «Tiene el golpeo, como el boxeo o el kickboxing, en el que puedes usar las manos, los pies, las rodillas y tiene agarres, luxaciones, estrangulaciones que son más de la lucha grecorromana y del jiu jitsu».
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Para alzarse con el título nacional, Amiran tuvo que derrotar en Madrid a un extremeño y a un canario. «Ganando esas dos peleas me proclamé campeón», recuerda. Ahora el objetivo es poder hacer un buen papel en el mundial, para ello busca un patrocinio o pequeñas ayudas para poder financiar la aventura que le lleve hasta Uzbekistán.
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