El Aparejadores se quita la espina y remonta la Supercopa al VRAC

El Quesos se adelantó gracias a un golpe de castigo que transformó BaltazarTaibo cuando se llevaban cuatro minutos de encuentro. El Recoletas Burgos respondió con la misma medicina, un golpe de castigo. Igualada que rompió el VRAC con una buena acción de ataque que finalizo el incombustible Gavidi bajo palos y transformó Taibo. El partido era un continuo toma y daca. Demasiada intensidad para un encuentro que se podía calificar de pretemporada, a puertas de una liga que arranca la semana que viene.

El Quesos Entrepinares se le veía con una velocidad más . Y eso le permitió tras una gran acción de la tres cuartos azulona volver a anotar un ensayo, su segunda marca, por medio de Taibo, que también transformó él mismo. Con 17-3 y un cuarto hora de encuentro, el VRAC había mostrado su mejor versión.

El equipo local sufría en exceso con las touch, un problema durante todo el choque, que acababan en manos contrarias. El Aparejadores pudo acortar distancias en la marcador, pero la marca de Bay fue anulada por fuera de juego del medio melé burgalés. Pasado el ecuador se pasó a jugar más en terreno vallisoletano. Burgos quería acercarse antes del descanso. Golpes de castigo continuos de un VRAC que se defendía como gato panza arriba. El empuje burgalés tuvo su recompensa en el minuto 31. Una acción de delantera que finiquitó Bernardo Vázquez y transformó Carrió. 17-10 y el cuadro visitante se colocaba a un ensayo transformado del cuadro quesero.

En los instantes finales, el quesero Álex Pérez vio la cartulina amarilla y dejó diez minutos a los hombres de Diego Merino en inferioridad numérica. El Aparejadores tuvo la opción de un ensayo final, pero no logró posar el oval en la zona de marca. Con 17-10 se llegaba al final de los primeros cuarenta minutos. El Quesos había empezado mejor y el Recoletas Burgos había ido de menos a más para terminar controlando el choque.

El Aparejadores lo intentó con uno más en el campo en la reanudación del encuentro. El VRAC se defendía como podía. Hubo un conato de tángana que quedó en nada. Burgos logró igualar la contienda por medio de Bustos y la transformación adicional de Carrió. 17-17. El quince burgalés se mostraba mucho más entero y con más recursos que los vallisoletanos. El partido parecía que estaba en la vía por la que quería transitar el cuadro burgalés.

El VRAC, que llevaba sin anotar más de cuarenta minutos sin lograr un punto, se estrenó gracias al pie de Taibo. Un golpe de castigo que anotó e igualó de nuevo la contienda.

Los puntos hicieron reaccionar a los locales, que lograron su tercera marca por medio de Miejimolle. 27-20 gracias al acertado Taibo en los lanzamientos a palos. Quedaba un cuarto de hora por delante.

Burgos no se iba a rendir. Acortó en el marcador gracias a un golpe de castigo y se adelanto de nuevo con un ensayo de Gil que transformó el acertado Tomás Carrió (27-30).

El Quesos Entrepinares tuvo la posibilidad de igualar, pero Taibo erró su primer lanzamiento a palos. Suponía la igualada a poco más de tres minutos para la conclusión. Ya no hubo tiempo para más. El Recoletas Burgos sumaba su primer título en la División de Honor después de cuatro finales. A los puntos había sido mejor que el vigente campeón de Liga y Copa.