Los Juegos Olímpicos de Tokio, aplazados a 2021

«Para salvaguardar la salud de los deportistas y de todos los involucrados en los Juegos Olímpicos y de la comunidad internacional», y «en base a la información proporcionada por la OMS hoy (por este martes)», el COI y el país organizador de los Juegos adoptaron una medida sin precedentes en la era moderna, al trasladar el gran evento deportivo de fecha. Hasta ahora, sólo las dos guerras mundiales habían obligado a suspender los Juegos Olímpicos, en 1916, 1940 y 1944, pero entonces fueron cancelados de forma definitiva, mientras que los de Tokio 2020, que mantendrán su nombre, han sido pospuestos, al igual que la Eurocopa de fútbol, tan sólo un año, cuando también se barabaja la posibilidad de celebrarlos en 2022.

«Es una medida urgente y necesaria», se congratuló el presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, quien reconoce que «por encima de todo está la salud de los ciudadanos de todo el mundo» y que «con el informe de la OMS y las voces que reclamaban el aplazamiento, el COI ha puesto sentido común y se ha tomado la decisión justa». Entre los países que exigían la suspensión de los Juegos en 2020, se encontraba, además de España, la mayor potencia deportiva del mundo, Estados Unidos, que tras sus federaciones de atletismo, natación y gimnasia -los tres grandes deportes olímpicos-, solicitó este mismo martes el aplazamiento confirmado horas después por el primer ministro de Japón y por el COI. Otros dos países de enorme peso olímpico, Canadá y Australia, ya anunciaron el día anterior que boicotearían los Juegos si el organismo presidido por Thomas Bach y el país asiático continuaban viviendo ajenos a la realidad, empeñados en que se disputasen este verano.

Después de tanto insistir en que Tokio 2020 seguiría su camino, ignorando la gravísima situación, no han tenido que transcurrir ni dos dias, desde que el domingo el COI abrió la puerta a un aplazamiento y se diese «un plazo de cuatro semanas» para hacer oficial una decisión ya tomada y anunciar las nuevas fechas de los Juegos. Fue este martes Shinzo Abe quien propuso a Thomas Bach los Juegos en 2021 y el dirigente alemán del COI, acorralado por la presión a lo largo y ancho del planeta, aceptó la solicitud «al cien por cien», consciente de que tanto los Mundiales de atletismo como los de natación previstos para el próximo año se habían ofrecido a ceder sitio en un calendario ya muy trastocado, con competiciones y torneos preolímpicos suspendidos.

«No se han discutido y no son una prioridad. Se trata de proteger vidas», respondió este martes Thomas Bach cuando se le preguntó por las consecuencias económicas del trasladar los Juegos a 2021, mientras que Shinzo Abe aventuró que el aplazamiento «será testimonio de la derrota del virus», el nuevo enemigo del mundo que ha provocado una pandemia que ha impedido a los deportistas olímpicos españoles, confinados, continuar con su preparación. «El COE fue precisamente el primero que alertó a Bach de la imposibilidad de hacer unos Juegos en los que no hubiera igualdad de condiciones para los deportistas de todos los países», recordó este martes Alejandro Blanco. «Si hay desigualdad en la competición difícilmente puede ser una competición justa», admitió el presidente del COE, que quiso transmitir «tranquilidad» a los deportistas españoles, «porque tienen aseguradas sus becas y tendrán todos los medios que necesiten para competir en los Juegos en igualdad de condiciones».