El Athletic sobrevive frente a la reacción tardía del Madrid

El Madrid de Zidane, que llegó a Málaga el pasado lunes, antes de lo inicialmente previsto, pues viajó desde Pamplona sin pasar por la capital de España debido a la histórica nevada provocada por la borrasca Filomena, pasa página de la polémica suscitada por las declaraciones del técnico francés tras el duelo ante Osasuna en El Sadar, en las que cuestionaba la conveniencia de disputar ese partido bajo las circunstancias del momento, una postura a la que incluso respondió duramente Javier Tebas. Evitó el preparador blanco echar más leña al fuego respecto a esta cuestión, aunque se mostró visiblemente molesto al ser preguntado por ella: «Dije lo que dije porque es lo que pensaba en ese momento. No era una excusa, sino una evidencia. No me voy a meter en nada ni voy a contestar. Es pasado y estoy centrado en lo que nos interesa ahora a los jugadores y a mí, que es el partido de mañana. Punto final».

Mientras, el Athletic también sufrió las consecuencias del temporal, pues para medirse al Atlético en el Metropolitano voló desde Bilbao a Madrid, donde no pudo finalmente aterrizar, ya que el avión se vio obligado a regresar ante lo complicado de las condiciones meteorológicas. El duelo ante los blancos será así la segunda piedra de toque para Marcelino García Toral en el banquillo rojiblanco, después de caer frente al Barça en San Mamés en su debut.

No se puede decir que el Real Madrid llegue en un mal momento. Acumula nueve encuentros sin conocer la derrota, con siete victorias y dos empates, eso sí, en los últimos tres compromisos. Dos igualadas en Elche y en Pamplona han frenado la progresión blanca en Liga ante un Atlético infalible, líder y campeón de invierno matemáticamente, que está ya a cuatro puntos cuando además ha disputado dos partidos menos.

Para recuperar sensaciones le llega al equipo de Chamartín una competición en la que defiende título, después de coronarse como primer campeón en el formato de final a cuatro hace un año en Arabia Saudí, donde goleó al Valencia en semifinales y se impuso al Atlético en la tanda de penaltis de la final. El torneo cambia ahora la península arábiga por Andalucía y Zidane afronta el compromiso con las bajas de Carvajal y Jovic por lesión, aunque el serbio está cerca de cerrar su salida al Eintracht como cedido. Se perfila por tanto el once que comenzó en El Sadar, con el tridente ofensivo de gala formado por Asensio, Benzema y Hazard. El belga afronta su segunda oportunidad desde el inicio tras reaparecer después de su última lesión con la presión de demostrar por fin su condición de estrella.

Por su parte, Marcelino recupera una opción defensiva con el regreso de Yeray Álvarez, pero sigue sin disponer de otra como Yuri Berchiche, lesionado en el estreno del asturiano, que repetirá previsiblemente alineación, a excepción de la entrada de Balenziaga por Yuri en el lateral izquierdo. Los 'leones' sueñan con repetir el título conquistado en 2015, después de una goleada para el recuerdo ante el Barça en San Mamés.

Sin cambio alguno en el once respecto al duelo frente a Osasuna en El Sadar, ya que aquello de las rotaciones extremas de Zidane parece haber quedado atrás en los últimos tiempos, la variación más significativa en el planteamiento táctico blanco pasó por la ubicación de Asensio en la izquierda, con Hazard de mediapunta, por detrás de Benzema. Con una

La tuvo Ramos de cabeza, pero cuando más cómodo parecía el Madrid, advirtió primero Williams con un remate de zurda fallido y ejecutó luego

Con el partido muy cuesta arriba, el Madrid regresó de vestuarios con Nacho en lugar de Varane, afectado por problemas físicos. La noche cada vez pintaba peor para el Madrid, que merodeó el área vasca pero sin claridad ni profundidad. Por contra, el Athletic volvió a helar la sangre de su rival en un

El equipo de Zidane, sin muchas ideas, se entregó al

Con la ventaja reducida a la mínima expresión, toda la seguridad se esfumó en el Athletic, que sin embargo, cosas del fútbol, tuvo la sentencia en un remate de Villalibre desbaratado Courtois. El Madrid olió la sangre y se tiró a tumba abierta en busca de la remontada. Benzema marcó pero en fuera de juego, pero