Francia-Bélgica: a ser más 'diablos' y gallos que nunca

San Petersburgo vivirá la semifinal que, para muchos, decidirá el campeón del Mundial. Se considera a Francia y a Bélgica como las dos escuadras más fuertes de las cuatro que siguen vivas, por encima de Inglaterra y de una Croacia exhausta tras dos prórrogas, frente a Dinamarca y contra los anfitriones. Pero para que se produzca ese momento el domingo, cuando el capitán del sucesor de Alemania levante la Copa Mundial de la FIFA, antes hay que superar dos peldaños.

Bélgica es sinónimo de gol en este campeonato. Acumula 14 dianas en cinco encuentros, con Lukaku como máximo exponente, autor de cuatro dianas, dos menos que Harry Kane. Pero, por supuesto, los 'diablos bojos' son mucho más: son Hazard, De Bruyne, Courtois, fundamental en el triunfo de cuartos contra Brasil, un Chadli que jugará hoy por el sancionado Meunier, un Carrasco que puede volver hoy al 'once'. Siempre sonaba en las quinielas, pero con Martínez confían en sí mismos, en el punto perfecto de maduración: «Ganar el primer título es una cosa más mental que de capacidad», ha dicho el de Balaguer. Pues Bélgica tiene las dos y una tremenda capacidad de sufrimiento, como demostró en la remontada ante Japón. También Francia dispone de estas virtudes, un grupo fabuloso con un centro del campo temible -Matuidi, Kanté y Pogba-, una delantera sobresaliente y una defensa solvente. ¿Quién será el vecino más fuerte?