Luque se refugia en su abogado para negar las coacciones al entorno de Jenni Hermoso

Durante apenas media hora de interrogatorio, Luque, de 45 años, ha elegido una estrategia conservadora de defensa, al contestar solo a las cuestiones planteadas por su abogado y eludir las preguntas de la Fiscalía y del resto de acusaciones populares personadas en el ejercicio de su derecho como investigado. Un interrogatorio, por lo tanto, infructuoso para el Ministerio Público en su intento de aclarar los indicios que penden sobre el compareciente.

A su abogado, por lo tanto, Luque ha negado las acusaciones sobre el intento de coacción al entorno de la jugadora de la selección Jenni Hermoso durante el viaje de Ibiza que hizo la plantilla a finales de agosto para celebrar el título de campeonas del mundo. Se refirió al cruce de mensajes que mantuvo con una amiga de la perjudicada, Ana Belén Ecube, para reunirse en la isla con Hermoso y poder rebajar la tensión pública generada por el beso en la boca del entonces presidente Luis Rubiales en la entrega del trofeo del Mundial de Australia y Nueva Zelanda.

En esos mensajes cruzados a través de WhatsApp, publicados ya por los medios, Luque le reprocha que a la jugadora no lo quisiera recibir y cuestionó la empatía y humanidad de ésta por no suavizar la versión sobre el beso: «No merece nada por la poca humanidad que tiene»; «Solo le deseo que la vida le devuelva todo lo que le está haciendo pagar injustamente a una persona»; «Me parece tan injusto, tan injusto lo que le está haciendo a Luis (Rubiales). Me parece de tanta bajeza humana la actitud de Jenni... Tan poca empatía y humanidad», escribió Luque.

El objetivo del director de la selección masculina con la amiga de Hermoso era conseguir un «simple gesto» de la futbolista del Pachuca mexicano para «quitarle» a Rubiales «el marrón más grande de su vida», pero finalmente la afectada optó por no verse con Luque, según declaró su amiga al juez el pasado 25 de septiembre. Precisamente, Ana Belén Ecube volverá a la Audiencia Nacional en noviembre para enfrentarse a un careo con el investigado Rubén Rivera, director de Marketing de la Federación entonces y que también estuvo en Ibiza con las jugadoras como «recadero cualificado», según se calificó en su declaración. El objetivo es aclarar las diferentes versiones que han dado en el juzgado sobre su encuentro en el citado viaje a Ibiza.

Siguiendo esta ronda de declaraciones, el titular del Juzgado Central de Instrucción número uno escuchará el jueves 2 de noviembre como testigos al seleccionador masculino Luis de la Fuente, al ex director de Comunicación de la RFEF Pablo García Cuervo y al subdirector de Comunicación, Enrique Yunta.

Ya el 14 de noviembre, tomará declaración como testigos al psicólogo de la selección femenina, Javier López Vallejo; al ex director de gabinete de Luis Rubiales, José María Timón; y al responsable de 'compliance' (normas y buenas prácticas) de la selección, Javier Pujol. Dos días después, escuchará también como testigos a la futbolista Laia Codina y al presidente del Comité Nacional de Fútbol Femenino, Rafael del Amo.

Está por determinar si el juez instructor aprovechará la convocatoria de Jenni Hermoso para los dos próximos partidos que la selección disputa contra Italia y Suiza en la Liga de Naciones el 27 y 31 de octubre para citarla y que preste declaración. No obstante, la intención del instructor es la de no dar publicidad a la declaración presencial de la jugadora por lo que previsiblemente, y dadas las quejas tanto de partes como del propio juez por filtraciones a la prensa, esa comparecencia se llevará con extremo sigilo.

Todo ello en el marco de esta causa, en la que el instructor investiga a Rubiales por delitos de agresión sexual y coacciones y a Luque, Rivera y el exseleccionador femenino Jorge Vilda, por el momento, por el segundo delito.